Nueva tormenta política entre el PP y el Gobierno a propósito del caso Gürtel. La pasada semana, el ex vicepresidente Francisco Álvarez Cascos denunció en relación a la investigación de la trama que “hay una camarilla policial dedicada a fabricar pruebas”. “Algunos policías que investigan al PP se hicieron famosos falsificando los papeles de Laos”, apostilló, en referencia al caso de Luis Roldán.
Este lunes, en declaraciones a Onda Cero, la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal, hacía suya esta acusación: “Algunos mandos policiales han pretendido manipular seguramente algún informe”. Y añadió: “Cuando alguien -Álvarez Cascos- dice algo tan importante lo que hay que hacer es investigar a aquel que se siente perseguido y manipulado por parte de los mandos de la Policía, lo que no hay que hacer es insultarle”. Y es que, según sentenció, hay quienes están teniendo comportamientos “impresentables” en el Ministerio del Interior.
Una denuncia que en nada gustó a Alfredo Pérez Rubalcaba, quien salía ante los medios de comunicación para acusar a “algunos dirigentes del PP” de tratar de defender “a sus repugnantes” atacando “a la Policía, a los jueces y fiscales”, extremo que tachó de “insostenible e indefendible”.
La respuesta del principal partido de la oposición no se hizo esperar. Pocos minutos después, Cascos sentenciaba: “el señor Rubalcaba, como acreditado manipulador, utiliza el viejo sistema de confundir la parte con el todo. En este caso concreto intenta confundir a la camarilla policial a las órdenes suyas y a las de la señora Fernández de la Vega, desde hace 20 años, con la Policía española al servicio de todos los españoles, que es lo mismo que confundir los garbanzos negros con los garbanzos”.
El asunto robaba protagonismo al resto en la reunión del Comité de Dirección de los populares, que como cada lunes se celebró en Génova 13 con Mariano Rajoy al frente. Ya en comparecencia ante la prensa, la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, fijaba la postura del PP. De primeras, anunció que el partido va a incluir la denuncia de Cascos -quien llevó ante la Fiscalía una información del grupo Prisa que le implicaba en la trama- en su causa general sobre el caso Gürtel.
En cuanto a las declaraciones del titular de Interior, Cospedal se mostraba contundente: “Lo que me parece repugnante es el intento de algunos de crear tramas que ellos sufrieron en sus propias carnes donde no las hay”, en relación a la financiación irregular del PSOE que, según el sumario, no existe en el PP.
No se quedó ahí la número dos de los populares. “Lo que me parece repugnante es que en la génesis de todo este asunto esté la cacería” en la que participaron el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón; el responsable de la Policía Judicial, Juan Antonio González; y el que fuera ministro de Justicia, que tuvo que dimitir a raíz de este escándalo, Fernández Bermejo.
No fue el único dirigente del PP en salir en defensa del ex vicepresidente. En opinión de Jaime Mayor Oreja, es “totalmente previsible” que la Policía pueda estar “fabricando pruebas” contra los acusados, y añadió que “si lo ha dicho Cascos sus razones tendrá”.