Después de leer detenidamente las declaraciones que realizó hace unos días al diario El País, me dirijo a usted para expresarle el sentir que como víctima del terrorismo las mismas han desencadenado en mí.
Sr. Presidente, como máximo responsable de la AVT me produce una tremenda preocupación y una gran desazón cuando define, en la citada entrevista, los posibles atentados terroristas como "accidentes". Usted sabe que he sido muy crítico con el lenguaje asumido por su Gobierno, y especialmente por usted, ya que en la mayoría de sus intervenciones elude llamar a las cosas por su nombre, haciendo propios en muchas ocasiones los conceptos empleados por Batasuna-ETA.
No recuerdo cuándo llamó por última vez asesinos a los terroristas de la banda ETA. Me preocupó, en gran medida, que en diferentes oportunidades se negara a realizar declaraciones condenando los atentados perpetrados por los asesinos etarras. Me preocupa igualmente que asuma el lenguaje de Batasuna-ETA, refiriéndose al "Proceso de Paz" como si de una guerra se tratase, como si víctimas y verdugos nos hubiésemos enfrentado. Y de nuevo me vuelve a inquietar e indignar que se refiera a los atentados como "accidentes".
Las víctimas del terrorismo no lo somos de un accidente, somos víctimas de la barbarie y el terror sembrado por las bombas y pistolas de una banda de ASESINOS que utiliza el terror para conseguir sus proyectos políticos.
Al inicio de la manifestación del pasado 4 de Junio del 2005, seguidores pro-etarras portaban una pancarta en la que se podía leer "AVT = Asociación Víctimas del Turismo", incluyendo frases como "30 muertos en accidente por coche bomba", etc. Esta pancarta de nuevo se pudo ver por las calles de Madrid al día siguiente en unos eventos convocados con motivo de la candidatura presentada por nuestro país para la celebración de los juegos Olímpicos en Madrid. Que casualidad, que incluso el término que usted emplea en la citada entrevista coincida con los perversos y humillantes conceptos que los pro-etarras utilizan para ahondar en el dolor de las víctimas del terrorismo.
Igualmente, también me ha resultado sorprendente e indignante su respuesta ante la pregunta: "¿Qué le diría en este momento a Josu Ternera?" Quisiera comentarle al respecto que, como familiar de 3 asesinados y 2 heridos como consecuencia del atentado perpetrado contra la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza, cuyo autor intelectual fue precisamente Josu Ternera, me ha sobrecogido su respuesta.
En la actualidad, Josu Ternera se encuentra huido de la justicia y en búsqueda y captura por el atentado de Zaragoza del 11 de Diciembre del 1987, donde fueron asesinadas 11 personas entre ellas 5 niños, produciendo más de 87 heridos.
Resulta tremendamente preocupante, que el Presidente del Gobierno de mi país, ante la oportunidad de dirigirse a este asesino prófugo de la Justicia, no anteponga su obligación de velar por que se cumpla la ley, y no le exija su inmediata entrega a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, a fin de que sea inmediatamente puesto a disposición judicial.
Sr. Presidente, usted ha dicho que concederá a las víctimas memoria, comprensión y apoyo. Si atiende a nuestro lema fundacional, constatará que el mismo se vertebra en torno a tres ejes: MEMORIA, DIGNIDAD Y JUSTICIA. Usted en sus declaraciones ha excluido expresamente la referencia a la DIGNIDAD y a la JUSTICIA. ¿Es el sacrificio de estas dos premisas otro pago más a los asesinos de ETA? Ante esto deseo indicarle tanto en lo personal como víctima del terrorismo como en lo colectivo (en mi condición de Presidente de la AVT), que nunca vamos a renunciar a la DIGNIDAD Y LA JUSTICIA. Velaré y trabajaré a pesar de todos los obstáculos, descalificaciones y ataques por defender estos valores. Para que la MEMORIA sea verdadera, le recuerdo Señor Presidente, que los muertos que pone ETA en esa mesa de negociación no fallecieron como consecuencia de un ACCIDENTE, fueron asesinados por ETA y eso los españoles nunca lo vamos a olvidar. No admitiremos que LA DIGNIDAD Y LA JUSTICIA que merecen las Víctimas del terrorismo sean moneda de cambio en esa negociación con los asesinos de nuestras familias.