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Carod Rovira renuncia al "gobierno de concentración" y ahora ofrece un "pacto nacional"

El líder de ERC y candidato a la presidencia de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, ya no habla del "gobierno de concentración nacional" del que habló el día de las elecciones catalanas. Ahora sólo se refiere a un "pacto nacional" sobre temas clave, como la financiación de Cataluña o la futura reforma del Estatuto de Autonomía. Carod, en declaraciones a Efe, garantiza que, cuando esté en el Gobierno catalán, "tenderá en todo momento puentes estables con la primera fuerza de la oposición", que seguramente será CiU.

L D (EFE) De estar en el gobierno catalán, cosa que nadie duda porque ERC se ha erigido como fuerza bisagra en Cataluña, la formación republicana "tendrá una relación excelente con las fuerzas que no estén en el ejecutivo", dice Carod-Rovira.
 
En declaraciones a Efe, el líder del partido republicano ha confirmado que el próximo martes analizará con la Ejecutiva de su partido si optan por un pacto con CiU o por una coalición con PSC e ICV-EuiA, aunque esta última opción es la que parece claro que será la que forme gobierno.
 
No obstante, Carod dice que, al margen del gobierno que se forme y de si éste es o no de concentración, como propugnó ERC en un principio, "entendemos necesario alcanzar un pacto nacional supra-partidista en temas clave, que quizás no son muchos, pero como mínimo hay media docena de ellos como el Estatut, la financiación, las infraestructuras, la lengua catalana o la inmigración". En este sentido, ha recordado que antes del verano envió una carta al resto de líderes políticos catalanes en la que les señalaba la conveniencia de alcanzar este tipo de pacto, con independencia de quien esté o no en el futuro gobierno de la Generalitat.
 
Promueve la unidad para negociar en Madrid
 
"En estos temas clave –ha dicho– nos tendremos que poner de acuerdo necesariamente, porque sobre ellos no habrá tanto actitudes de izquierdas o de derechas muy divergentes, sino que tendremos que dibujar un terreno común". "Por lo tanto, –ha añadido– si ERC está en el gobierno, éste tendrá una relación excelente con las fuerzas que no estén en el ejecutivo". "Además, es evidente que siempre seremos más fuertes si vamos a negociar todos en Madrid en nombre del Parlament de Cataluña que no si vamos como ha ocurrido hasta ahora, en que sólo negociaba el partido que gobernaba y en solitario", ha subrayado.
 
Sobre la propuesta de CiU de que el ejecutivo mantenga la puerta abierta a la posible incorporación de otro partido que ahora pueda quedar excluido, ha asegurado que "ERC no tiene ningún inconveniente", ya que "nosotros siempre hemos defendido un gobierno lo más plural, abierto y de concentración posible". "Estamos asistiendo –dice– a un escenario nuevo, al que no estamos acostumbrados, y hay algunos que nos dicen que las negociaciones tendrían que ir más deprisa, puede que sí, pero lo que ocurre es que hasta ahora no se había producido una situación como la actual".
 
El nuevo Ejecutivo se anunciará en breve
 
"No podemos ir con prisas –ha recalcado–, no estamos jugando un partido de fútbol, ni tampoco es una tertulia de amigos, estamos discutiendo qué gobierno tendrá Cataluña en los próximos cuatro años y que política se aplicará en dicho período, y esto se tiene que hacer bien y sin precipitaciones". El secretario general de ERC ha considerado, de todas formas, que la composición del ejecutivo quedará decidida la semana próxima y que "tomaremos una decisión antes del Consell Nacional del sábado día 13. Tenemos este largo fin de semana de puente para pensar, un martes para discutir intensamente en la Ejecutiva, y como consecuencia de este debate yo acabaré haciendo una propuesta de gobierno al Consell Nacional".

Es consciente de que "cualquier pacto de gobierno, se haga con quien se haga, inicialmente tendrá ciertas críticas, porque siempre habrá una parte del electorado de cada partido gobernante que no quedará satisfecho con el pacto, pero tenemos cuatro años para demostrar que hemos hecho el acuerdo que era necesario, nos tendremos que explicar bien y no pasará nada más". "La verdad -ha afirmado- es que personalmente estoy muy tranquilo, porque hay una clara unidad interna existente dentro de ERC y está la confianza que ha tenido en nosotros la gente".

Sobre las reacciones que provoca en el resto de España el papel de "árbitro" que está asumiendo ERC en la política catalana, considera que "el único a quien le ha costado tres semanas entender que el gobierno de Cataluña lo harán los partidos catalanes es Aznar, porque los empresarios sí que lo han entendido rápido". "Nadie puede ignorar -ha apuntado- que ERC gobierna hoy en municipios donde vive el 60% de la población y que hemos quedado como segunda fuerza en más de dos tercios de los municipios".

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