Un Ejecutivo, recalcó Carod-Rovira, "que es legítimo aunque a ustedes no les guste", y explicó que si ERC exige que no se "toque" más el Estatut y no sea modificado en el Tribunal Constitucional "es porque después de cómo quedó el texto tras el pacto que hizo usted, señor Mas, con Zapatero, por poco que toquen no quedará nada".
Minutos antes, Artur Mas denunció que la propuesta ha constatado el fracaso del "autoritarismo" de José Montilla. Mas ha avisado de que "según qué respuesta diera CiU en este plenario", Montilla "podría tener las horas contadas" como presidente de la Generalidad. Tras criticar la intervención de Montilla por estar "preparada" y ser "bastante administrativa y poco de presidente", advirtió al presidente catalán que "no está en condiciones de hablar de firmeza y coherencia", después de que ERC "le haya puesto la presidencia de la Generalitat a subasta pública".
"¿Cómo puede aceptar que le hagan un reto de estas características y mirar hacia otro lado?", le ha preguntado a Montilla, tras constatar que cuatro meses después de constituirse el nuevo gobierno se produce "este espectáculo dantesco, tragicómico", que también ha definido como "caos en el tripartito". En opinión de Mas, la relativa tranquilidad de estos primeros cuatro meses se debía más a las "dosis de autoritarismo" del presidente que a su verdadera "autoridad" para liderar el gobierno.
También ha denunciado el "sectarismo" de Montilla por no reconocer el papel de CiU en la aprobación del Estatut y le ha acusado de haber trabajado para recortar el texto en su tramitación en Madrid, cuando él era ministro de Industria. Según Mas, el presidente catalán busca la "confrontación" con CiU, que, a su juicio, mantiene una actitud "constructiva" desde la oposición.
Ha añadido que "moralmente no nos pueden pedir una adhesión a sus tesis", sino que sólo "nos pueden pedir una negociación con el tripartito". Por otra parte, para desacreditar la voluntad independentista de ERC ha subrayado que "no hay nada más dependiente que poner de presidente de la Generalitat a una persona que aún es miembro de la ejecutiva del PSOE. Esto está en las antípodas de la independencia".
Por su parte, el portavoz de CiU en el Congreso y líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, ha afirmado en declaraciones a Telemadrid que "lo lógico es que un presidente que no estime simplemente el poder, sino que estime la dignidad política", expulse a unos socios que "le están poniendo los cuernos públicamente". Según Duran, el "problema" no es que Esquerra defienda la independencia, sino que ERC "está hoy en la centralidad de la política catalana y española".
"Ese partido sobre el que se centra la vida política catalana es el partido del que depende José Luis Rodríguez Zapatero a nivel español y es el partido del que depende Montilla", ha manifestado. Duran ha remarcado que "nosotros no gobernaremos con ERC a raíz de esta propuesta de resolución" porque "aquí no hay trueque, aquí no hay cambios, aquí no se acepta que Artur Mas sea presidente porque les votemos una determinada propuesta de resolución".
