¡Muy bien! Así se hace: sacar a la luz las muchas verguenzas del gobierno. Devolverles la jugada. Sin timideces ni complejos. A LA CARA, a las claras, con desparpajo, con osadía, sin dejarles recuperarse del golpe.
Si no lo hacen, todos pensaremos que son unos ángeles, cuando en realidad su actuación nos confirma que estamos frente al mismo demonio - lobo- con piel de bambi...