(Libertad Digital) La investigación sobre la muerte de 17 militares en un helicóptero Cougar el 16 de agosto de 2005 en Afganistán, puesta en su día como ejemplo de transparencia y profesionalidad, huele cada vez peor. Según publica la cadena COPE, el instructor del llamado caso "Cougar", un teniente coronel, entregó al entonces ministro de Defensa, José Bono, documentación que estaba bajo secreto de sumario para aquellos que no estaban personados en el procedimiento. Y el Ministerio de Defensa no lo estaba.
El instructor cuenta en un resumen que envió al juez junto al atestado que “ocasionalmente” había entregado al titular de Defensa parte de esa documentación, según aseguran fuentes jurídicas.
Sin embargo, ésta no es la única irregularidad en la investigación del accidente del Cougar de la que se ha tenido conocimiento en las últimas semanas. También se ha conocido que Bono se reunió con el teniente coronel instructor del caso -según ha sabido la COPE- al menos en tres ocasiones; dos veces el 17 de agosto de 2.005, y una tercera reunión el día 18. El diario ABC ya desveló que que el teniente coronel que instruía la causa se reunió el 18 de agosto de 2005 con el entonces ministro de Defensa, José Bono.
Por otro lado, el secretario del atestado ha declarado que ni siquiera sabía que figuraba como tal y que sólo fue el escolta del entonces ministro de Defensa Bono. El secretario es el que da fe de las pruebas y las declaraciones que se recogen durante el atestado. Además, el juez solicitó los informes de los hechos al CNI, que le dio un "no" rotundo.