La decisión del Comité Electoral del PSOE de suspender el multitudinario acto de la plaza de toros de Vistalegre, previsto para el 3 de abril desde hace tres meses, es, sin duda, el tema del día y del que todos hablaban en los pasillos del Congreso. Es el mismo escenario en el que José Luis Rodríguez Zapatero fue proclamado candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno en el año 2000. De ahí, las connotaciones obvias por la cancelación de un foro emblema para el 'zapaterismo' y su marca ZP.
De ahí también la irritabilidad de algunos como el número dos del PSOE, José Blanco, al ser preguntado por Libertad Digital:"¿Qué me va a parecer si lo he decidido yo?", se indignaba Blanco. El vicesecretario general del PSOE eludía hacer ninguna lectura sobre el debate sucesorio. "No mire, la lectura es ninguna. Yo planifico la campaña electoral del partido socialista; la planifico para ganar las elecciones y no por lo que me digan los periodistas, por lo tanto, he planificado la campaña electoral, cuando se la cuente entenderán las decisiones que he tomado. Pero como las estrategias no se cuentan, yo no se las voy a desvelar", sentenciaba un enigmático Blanco dándose media vuelta.
También el que fue proclamado en su día candidato a la Presidencia del Gobierno en ese mismo escenario de Vistalegre, José Luis Rodríguez Zapatero, ha tenido que responder a este asunto a preguntas de Libertad Digital. "¿Qué le parece que se haya suspendido el acto de Vistalegre". "Bien, bien", sonreía el presidente señalando que estaba citado a hablar en el Congreso. "Pero, ¿tiene algo que ver con la sucesión?", le repreguntaba este diario. "No, no", se marchaba riendo.
La suspensión del acto, tradicional pistoletazo de salida de la precampaña socialista, se acordó el lunes por la tarde en la reunión del Comité electoral del PSOE en Ferraz y hoy algunos evitaban hacer declaraciones al escuchar la pregunta. Es el caso de Carmen Chacón, la titular de Defensa y sucesora de Zapatero según las quinielas. En los corrillos, sorpresa, malestar y nerviosismo definían hoy el ánimo de los diputados socialistas. Sorpresa por lo que significa en clave sucesoria esta suspensión. Malestar y nerviosismo porque se acrecienta la incertidumbre sobre el futuro político de Zapatero, cuyos 'tiempos' comienzan a exasperan a más de uno en el PSOE, sobre todo entre los barones territoriales.
Fuentes socialistas explicaban algo más tarde en los pasillos que la famosa "estrategia" consiste en "no hacer la campaña en clave nacional que quiere el PP", es decir, que la estrategia de Blanco es la de atender las peticiones de los barones territoriales de que no se entiendan las elecciones municipales como un plebiscito para Zapatero. Dicho de otra forma: que no quieren que Zapatero acuda a sus territorios a hacer campaña por las consecuencias electorales que pudiera tener. Por ello, el PSOE ha enviado a los miembros de su Ejecutiva un SMS en el que justifican la suspensión de Vistalegre. El mensaje de texto, según Europa Press, es el siguiente:
"Vista Alegre supone un enorme esfuerzo que preferimos concentrar en actos territoriales y esa decisión encaja en nuestra estrategia electoral que es la de poner el foco en las elecciones de alcaldes y alcaldesas y en las de las CCAA, frente a la estrategia del PP de convertir el 22-M en una primera vuelta de las elecciones generales".
Algunos barones ven a Zapatero como Aznar
Hoy mismo el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, valoraba positivamente la decisión de Blanco porque "lo mejor es territorializar o regionalizar" la campaña. También Tomás Gómez, el líder del PSM, ha calificado la decisión como "una estrategia razonable e inteligente" porque "el PP intenta que el 22 de mayo no se hable de lo que los ciudadanos se juegan, sino de otras cuestiones". El mismo argumento que defiende el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, que ha abogado por hacer "una campaña pegada al territorio" para "explicar que se está haciendo y qué se quiere hacer".
Introduce Fernández Vara otro argumento que es el de la austeridad, aludiendo a que son tiempos para no hacer actos de "alto coste" como el de Vistalegre sino una campaña basada en "menos carteles y ocurrencias y más rigor y seriedad". Llama la atención la respuesta del candidato del PSOE a Extremadura sobre si le gustaría que Rodríguez Zapatero participara en la campaña extremeña:"el presidente del Gobierno, se llame Zapatero o Aznar, cuando viene a Extremadura no necesita invitación porque viene a su casa".
En resumen, la estrategia de la campaña pasará de ocultar las siglas del PSOE, como ha ocurrido en Madrid, a ocultar a Zapatero, aunque desde Moncloa aseguran a que el presidente del Gobierno "tendrá una agenda apretada en campaña". Tomás Gómez ha asegurado hoy que José Luis Rodríguez Zapatero "estará en todos los territorios, en actos grandes como corresponden a un presidente del Gobierno". Pero a nadie se le olvidan las palabras de Alfredo Pérez Rubalcaba hace tres semanas en un mitin de campaña en Extremadura. "Es un honor poder decir la noche de las elecciones, el 22 de mayo, yo estuve aquí, yo estuve en la presentación de Guillermo y subir al despacho de José Luis y decirle: ‘mira, mira, en todos estos estuve yo; a ver, tú, a ver, qué tienes’", dijo ante la carcajada general del auditorio.