
ERC y PPC han destacado que el encuentro hay que situarlo dentro de "la normalidad que tiene que presidir las relaciones entre los partidos" por muy distintos que sean los objetivos que defienden, y además, han señalado que ha servido para dejar atrás la etapa en la que Esquerra impuso dentro del Pacto del Tinell del primer gobierno tripartito, la cláusula de que el PP debía quedar excluido de cualquier acuerdo político de ámbito catalán.
La portavoz del grupo de ERC, Anna Simó, ha recordado que aquella exclusión se produjo en un contexto muy determinado, en el que se venía de una legislatura con una mayoría absoluta del gobierno que presidía José María Aznar, y desde entonces, "la situación ha cambiado mucho, incluso dentro del PP".
De hecho, es la ERC presidida por Puigcercós la que está insistiendo más en la necesidad de que, en la negociación sobre la financiación, haya un frente catalán de "3+2", es decir, que no sólo estén las tres formaciones del tripartito y CiU, sino que también se pueda sumar el PPC en el acuerdo.
Alicia Sánchez Camacho ha vuelto a indicar, sin embargo, que su partido, más que un frente catalán, lo que preconiza es un "frente común de todas las Comunidades" porque considera que el nuevo sistema debe poder ser aceptable por todas ellas.