LD (Agencias) Los candidatos autonómicos del PP han acudido a Génova para explicar sus estrategias de campaña. En este sentido, el líder de los populares de Galicia y candidato a presidir la Junta, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que se presenta a las elecciones autonómicas para ganar con mayoría absoluta.
En una intervención ante la Junta Directiva del PP, Núñez Feijóo ha dicho que en estas elecciones autonómicas el PP "puede y debe iniciar un cambio político en España" y, como en 1989, con Manuel Fraga, "espero que el PP de Galicia, en marzo de 2009, veinte años después, inicie ese cambio y para eso estamos preparados".
El candidato ha hecho hincapié en que, según datos que maneja el partido, la mayoría de los ciudadanos gallegos creen que el PP es el partido mejor preparado para gobernar en tiempos de crisis, el 60 por ciento de los gallegos pide un cambio de Gobierno y, por primera vez en diez años, la mayoría de los nuevos votantes dicen que van a votar al PP.
A juicio de Feijóo, el PP está, "sin duda, en uno de los mejores momentos" y en las mismas condiciones y con las mismas posibilidades que hace cuatro años de convertirnos en el próximo Gobierno de Galicia".
El candidato ha agradecido el "permanente apoyo" recibido por el partido y por todos los dirigentes nacionales, y ha asegurado que desde Galicia "vamos a contar con ellos".
Feijóo también ha reiterado que el PP no se presenta a las elecciones para perderlas "e intentar que el 15 por ciento del censo electoral -el voto exterior- que no puede votar en urna, nos pueda beneficiar y aun perdiendo, con ese censo podamos obtener un buen resultado".
Ha insistido en que los objetivos planteados son subir voto en las cuatro provincias y en todos los ayuntamientos, y si la mayoría absoluta se obtiene a partir de 37 escaños "no nos vamos a conformar con menos de 39, sin renunciar a alcanzar alguno más".
El candidato del PP también ha hecho un "brevísimo balance" del Gobierno del a Xunta, que resumió en "decadencia económica y desconcierto político". A juicio de Núñez Feijóo, "estas dos grandes herencias" recuerdan que en Galicia el porcentaje de la renta está por debajo de la media de España, en un 18 por ciento, y la población pensionista se sitúa por encima de la media nacional, llegando a cuotas del 22 por ciento.
Según el presidente del PP gallego, en esta Comunidad "hablar de economía es hablar de crisis, hablar de empleo es hablar de paro y donde 600 gallegos van al paro todos los días".
Núñez Feijóo ha subrayado que todo esto se adereza "con una enorme división del Gobierno que se plantea desde el primer día de su toma de posesión hasta el último".
El candidato también se ha referido a la lengua y ha criticado que el PSOE, "llevado por la minoría nacionalista del BNG", ha roto el consenso lingüístico y Galicia, "que era una comunidad bilingüe con una lengua que se podía exportar al resto de las comunidades autónomas, hoy ya no lo tiene". Por ello, ha apelado por volver "al consenso lingüístico y al bilingüismo cordial, que nunca debimos dejar".
En una intervención ante la Junta Directiva del PP, Núñez Feijóo ha dicho que en estas elecciones autonómicas el PP "puede y debe iniciar un cambio político en España" y, como en 1989, con Manuel Fraga, "espero que el PP de Galicia, en marzo de 2009, veinte años después, inicie ese cambio y para eso estamos preparados".
El candidato ha hecho hincapié en que, según datos que maneja el partido, la mayoría de los ciudadanos gallegos creen que el PP es el partido mejor preparado para gobernar en tiempos de crisis, el 60 por ciento de los gallegos pide un cambio de Gobierno y, por primera vez en diez años, la mayoría de los nuevos votantes dicen que van a votar al PP.
A juicio de Feijóo, el PP está, "sin duda, en uno de los mejores momentos" y en las mismas condiciones y con las mismas posibilidades que hace cuatro años de convertirnos en el próximo Gobierno de Galicia".
El candidato ha agradecido el "permanente apoyo" recibido por el partido y por todos los dirigentes nacionales, y ha asegurado que desde Galicia "vamos a contar con ellos".
Feijóo también ha reiterado que el PP no se presenta a las elecciones para perderlas "e intentar que el 15 por ciento del censo electoral -el voto exterior- que no puede votar en urna, nos pueda beneficiar y aun perdiendo, con ese censo podamos obtener un buen resultado".
Ha insistido en que los objetivos planteados son subir voto en las cuatro provincias y en todos los ayuntamientos, y si la mayoría absoluta se obtiene a partir de 37 escaños "no nos vamos a conformar con menos de 39, sin renunciar a alcanzar alguno más".
El candidato del PP también ha hecho un "brevísimo balance" del Gobierno del a Xunta, que resumió en "decadencia económica y desconcierto político". A juicio de Núñez Feijóo, "estas dos grandes herencias" recuerdan que en Galicia el porcentaje de la renta está por debajo de la media de España, en un 18 por ciento, y la población pensionista se sitúa por encima de la media nacional, llegando a cuotas del 22 por ciento.
Según el presidente del PP gallego, en esta Comunidad "hablar de economía es hablar de crisis, hablar de empleo es hablar de paro y donde 600 gallegos van al paro todos los días".
Núñez Feijóo ha subrayado que todo esto se adereza "con una enorme división del Gobierno que se plantea desde el primer día de su toma de posesión hasta el último".
El candidato también se ha referido a la lengua y ha criticado que el PSOE, "llevado por la minoría nacionalista del BNG", ha roto el consenso lingüístico y Galicia, "que era una comunidad bilingüe con una lengua que se podía exportar al resto de las comunidades autónomas, hoy ya no lo tiene". Por ello, ha apelado por volver "al consenso lingüístico y al bilingüismo cordial, que nunca debimos dejar".
Basagoiti reclama tres consejerías
Por su parte, el presidente del PP en el País Vasco, Antonio Basagoiti, ha afirmado que los populares representan la auténtica garantía del cambio, toda vez que PSE-EE y PNV "hacen cosas parecidas", y ha reclamado las consejerías de Educación, Cultura e Interior para asegurar la libertad.
Con "campañas imaginativas", bajo la llamada "políticapop", el PP vasco ofrecerá candidaturas de "integración" hacia una meta: lograr la mayor fortaleza posible en el Parlamento vasco porque "cuanto más fuertes" sean los populares en la Cámara de Vitoria, más se robustecerá "la alternativa" política.
Porque frente a la polarización previsible de la campaña entre los candidatos del PNV, Juan José Ibarretxe, y del PSE, Patxi López, el PP tiene "hueco", las oquedades que precisamente dejan los socialistas, el "cambio aparente" frente al "cambio auténtico" de los populares.
Por ese hueco, ha dicho Basagoiti, caben las "fortalezas" del PP, precisamente porque el PSE-EE deja a los populares un "espacio político" provocado por "hacer cosas parecidas al PNV" y defender "todo lo que defienden" los nacionalistas vascos, como la política lingüística. Igualmente ha asegurado que el PSE-EE siempre preferirá "echarse en brazos" de los nacionalistas antes que formar un gobierno en alianza con el PP.
Además, mientras Patxi López se caracteriza por seguir las directrices nacionalistas, Ibarretxe sólo genera "hartazgo", y en esa tesitura, a juicio de Basagoiti, el PP vasco afronta los comicios del 1 de marzo con una "buena base política", con "coherencia" y una "defensa clara de las libertades y del Estado de Derecho".
El candidato del PP a la Lehendakaritza ha reconocido que el PP también tiene ante sí varias dificultades. Además de la "polarización" de la campaña, lo que se traducirá, ha dicho, en "debates a dos" y en la consiguiente falta de pluralidad, Basagoiti también ha indicado que el PP acude a las elecciones "sin ser la segunda fuerza política".
Identificadas las dificultades y reconocidos los puntos fuertes, el presidente del PP vasco ha citado los ejes de la campaña: la defensa de las libertades, lo que conlleva acabar con ETA, así como su deslegitimación, y la superación de la crisis económica.
Por tanto, el PP en el País Vasco es un partido "al alza", lo certifican las encuestas, ha apuntado Basagoiti. "Se juega mucho el País Vasco, se juega las libertades y la prosperidad; en la medida en que haya un lehendakari u otro, se podrá acelerar más o menos el final del terrorismo", ha sentenciado.
Porque frente a la polarización previsible de la campaña entre los candidatos del PNV, Juan José Ibarretxe, y del PSE, Patxi López, el PP tiene "hueco", las oquedades que precisamente dejan los socialistas, el "cambio aparente" frente al "cambio auténtico" de los populares.
Por ese hueco, ha dicho Basagoiti, caben las "fortalezas" del PP, precisamente porque el PSE-EE deja a los populares un "espacio político" provocado por "hacer cosas parecidas al PNV" y defender "todo lo que defienden" los nacionalistas vascos, como la política lingüística. Igualmente ha asegurado que el PSE-EE siempre preferirá "echarse en brazos" de los nacionalistas antes que formar un gobierno en alianza con el PP.
Además, mientras Patxi López se caracteriza por seguir las directrices nacionalistas, Ibarretxe sólo genera "hartazgo", y en esa tesitura, a juicio de Basagoiti, el PP vasco afronta los comicios del 1 de marzo con una "buena base política", con "coherencia" y una "defensa clara de las libertades y del Estado de Derecho".
El candidato del PP a la Lehendakaritza ha reconocido que el PP también tiene ante sí varias dificultades. Además de la "polarización" de la campaña, lo que se traducirá, ha dicho, en "debates a dos" y en la consiguiente falta de pluralidad, Basagoiti también ha indicado que el PP acude a las elecciones "sin ser la segunda fuerza política".
Identificadas las dificultades y reconocidos los puntos fuertes, el presidente del PP vasco ha citado los ejes de la campaña: la defensa de las libertades, lo que conlleva acabar con ETA, así como su deslegitimación, y la superación de la crisis económica.
Por tanto, el PP en el País Vasco es un partido "al alza", lo certifican las encuestas, ha apuntado Basagoiti. "Se juega mucho el País Vasco, se juega las libertades y la prosperidad; en la medida en que haya un lehendakari u otro, se podrá acelerar más o menos el final del terrorismo", ha sentenciado.