(Libertad Digital) Rafael Bardají, director de Política Internacional de la FAES, indicó a la COPE que hay que tener claro que en Afganistán, ahora mismo se está "jugando un frente central, al igual que en Irak", en la guerra contra el terror y contra el "yihadismo global" que cuenta con el apoyo de lo que queda del régimen de los talibanes. El objetivo último de esa macabra alianza, señaló, es mantener una ofensiva para que las fuerzas de la OTAN se planteen la continuidad de las operaciones militares en ese país y se acabe con la posibilidad de apuntalar el Gobierno que encabeza el presidente Hamid Karzai.
El especialista explicó que el incremento de los ataques y atentados responde a que los terroristas están buscando un "eslabón débil" para que "vuelva a repetirse lo que vimos con Irak: una salida prematura y vergonzosa que pudiera acabar con la presencia de los países aliados en Afganistán". En esa dinámica, Bardají aseguró que los terroristas talibanes están concientes de que en la misión afgana hay naciones como EEUU, Australia, el Reino Unido y algún país europeo nórdico que están llevando a cabo acciones de combate, como por ejemplo frenar la famosa ofensiva de primavera que se iba a lanzar desde el sur del país.
Puntos débiles
Hay luego, subrayó, un grupo europeo de la OTAN que mantiene una "actitud vergonzosa, como pudiera ser la del Gobierno español que ni siquiera habla de la OTAN, sino de mandato de la ONU". Esas tropas, añadió, simplemente están patrullando su zona y no están dispuestos a salir de su teatro de operaciones ni tampoco están por capturar a los terroristas. Consideró que esa situación "ha ido envalentonando a los talibanes".
Bardají destaca que en Afganistán actualmente existe una proporción bajísima de soldados por número de población civil: "Uno por mil, cuando tendría que estar en cien por mil, al menos". Otro parámetro lamentable en ese país, destacó, es el de militares por kilómetro cuadrado que se reduce por las dificultades de abastecimiento y de despliegue de medios. Bajo ese panorama, mencionó que los talibanes saben que las "tropas españolas están concentradas en un punto y tienen reglas de enfrentamiento. Ellos están dispuestos a explotar esas ventajas".
El gran quiebre
Sobre la posibilidad de que el general Félix Sanz Roldan, jefe del Estado Mayor de la Defensa presida el Comité Militar de la OTAN, recordó que al presidente José Luis Rodríguez Zapatero se la venido pidiendo desde hace dos años, no sólo desde EEUU sino también de los mandos operativos en Afganistán y de los países de la Unión Europea, que incremente su participación en la misión internacional que se desarrolla en ese país. "Desde entonces se le ha pedido sin éxito el envío de dos helicópteros", lamentó. Pero, interpretó que el "gran quiebre" de Zapatero dentro de la Alianza Atlántica fue la negativa para que España asumiera el mando militar multinacional como parte de los acuerdos de rotación. "Ahí estuvo el error: romper con lo que son los procedimientos habituales dentro de la OTAN", destacó.
Además, recordó que los propios militares españoles han pedido al presidente que aumente el contingente para garantizar mejor su función, "pero se ha negado, se vuelve a negar". En su opinión, "ese es el trasfondo: si Zapatero pudiera se saldría de Afganistán y yo diría que si pudiera lo haría de la OTAN, que eso es lo que le debe pedir el cuerpo a tenor de lo que vemos".