(Libertad Digital) La sesión de control de este miércoles comenzó eclipsada por una imagen simbólica sobre el fin de la guerra en Irak. Cientos de iraquíes intentaban destruir con cuerdas y hasta con mazas una estatua de Sadam Husein en Bagdad, hasta que minutos después los marines usaban una grúa para tumbar el símbolo del dictador. Pero en el Congreso, la oposición criticaba a Aznar por el apoyo de España a Bush. Gaspar Llamazares tuvo a las víctimas como argumento. La contestación del presidente fue corta: "Lamentamos la muerte de todos los civiles", dijo. Pero aclaró que él no ha hablado de victoria sino de paz y, en este sentido, le recordó a Llamazares que la seguridad internacional que se consiga tras la caída del régimen no le deberá nada a su coalición.
Por su parte, Rodríguez Zapatero dijo que con la intervención bélica no se buscaba "ningún desarme", sino "una guerra" y violar la legalidad "ocupando un país para obtener una situación estratégica". Tras la acusación, el líder socialista pidió a Aznar que exija responsabilidades y explicaciones al gobierno de EEUU por la muerte de los periodistas en el Hotel Palestina de Bagdad. Por último, le reclamó que expusiera qué iniciativas tiene el Gobierno ante lo que queda por delante. Aznar comenzó contestando a esta última petición, también con brevedad: "Descargar en Um Qasar la ayuda humanitaria que usted no quería que se mandara". A continuación, en su réplica, Zapatero dio el mejor argumento a Aznar para su respuesta final. El líder socialista esgrimió la legalidad internacional y el papel de la ONU en la reconstrucción de Irak exigiendo que "los ocupantes" no sean quienes tengan la iniciativa.
Aznar disfrutó de su mejor oportunidad: "Contestar a Llamazares y a usted es lo mismo", dijo, para recordar a Zapatero su papel antes de que estallara la guerra: "Es una pena que usted haya declarado que le daban igual las resoluciones de la ONU". El presidente reprochó al líder del principal partido de la oposición que ahora pida un papel preponderante para Naciones Unidas en la reconstrucción. "Nadie como usted ha cerrado las puertas a las iniciativas. De una oportunidad al sentido común", subrayó. Pero no quiso cerrar su respuesta sin antes recordar que el PSOE ha apoyado su oposición en "ambiciones personales o políticas que son un riesgo para este país". En definitiva, según Aznar, "hemos cumplido con nuestra responsabilidad y vamos a seguir haciéndolo. Y hoy se sabe que tampoco en esto se le debe nada", dijo.
Minutos después, una grúa del Ejército de EEUU derribaba la estatua de Sadam y los cientos de iraquíes concentrados descargaban su ira contra los restos, ya en el suelo.
Por su parte, Rodríguez Zapatero dijo que con la intervención bélica no se buscaba "ningún desarme", sino "una guerra" y violar la legalidad "ocupando un país para obtener una situación estratégica". Tras la acusación, el líder socialista pidió a Aznar que exija responsabilidades y explicaciones al gobierno de EEUU por la muerte de los periodistas en el Hotel Palestina de Bagdad. Por último, le reclamó que expusiera qué iniciativas tiene el Gobierno ante lo que queda por delante. Aznar comenzó contestando a esta última petición, también con brevedad: "Descargar en Um Qasar la ayuda humanitaria que usted no quería que se mandara". A continuación, en su réplica, Zapatero dio el mejor argumento a Aznar para su respuesta final. El líder socialista esgrimió la legalidad internacional y el papel de la ONU en la reconstrucción de Irak exigiendo que "los ocupantes" no sean quienes tengan la iniciativa.
Aznar disfrutó de su mejor oportunidad: "Contestar a Llamazares y a usted es lo mismo", dijo, para recordar a Zapatero su papel antes de que estallara la guerra: "Es una pena que usted haya declarado que le daban igual las resoluciones de la ONU". El presidente reprochó al líder del principal partido de la oposición que ahora pida un papel preponderante para Naciones Unidas en la reconstrucción. "Nadie como usted ha cerrado las puertas a las iniciativas. De una oportunidad al sentido común", subrayó. Pero no quiso cerrar su respuesta sin antes recordar que el PSOE ha apoyado su oposición en "ambiciones personales o políticas que son un riesgo para este país". En definitiva, según Aznar, "hemos cumplido con nuestra responsabilidad y vamos a seguir haciéndolo. Y hoy se sabe que tampoco en esto se le debe nada", dijo.
Minutos después, una grúa del Ejército de EEUU derribaba la estatua de Sadam y los cientos de iraquíes concentrados descargaban su ira contra los restos, ya en el suelo.