En su conferencia inaugural de la escuela de verano organizada por la Fundación FAES, Aznar expresó su preocupación por que los socialistas sigan sin un proyecto de gobierno tres meses después de las elecciones, y advirtió de que "sin principios ni valores sólo queda el oportunismo, el marketing y la demagogia, o eso que ahora se llama talante".
Así, el presidente de FAES recordó que en un país en que "se dan simultáneamente el secesionismo político y la amenaza del terrorismo separatista", el Gobierno "cometería el mayor error imaginable si emprendiera una reforma constitucional". "Se podrán poner todos los paños calientes que se quieran, pero en el momento en el que se tome el bisturí y se empiece a hacer cirugía constitucional, creo yo que vamos a ver de cerca algunos riesgos que quedaron finalmente superados en la Transición democrática", añadió.
Aseguró que en materia de política exterior y de seguridad, "salir corriendo no es una política, es sencillamente la mejor fórmula para perder la confianza de los amigos y el respeto de los adversarios", y subrayó que, en la negociación de la Constitución europea, España se fue voluntariamente de la "mesa de los grandes" a la "mesa de los niños, donde no se decide nada", y subrayó que "lo peor es que no nos han echado, nos hemos ido voluntariamente". Sobre esta cuestión, y a diferencia de la línea marcada por Mariano Rajoy, Aznar cree que los españoles "harían muy bien en reflexionar qué van a hacer antes de tomar una decisión. Reflexionar y después tomar una decisión".
Según ha podido saber Libertad Digital, estas declaraciones han provocado desconcierto entre algunos dirigentes del PP, sorprendidos por el desmarque del todavía presidente de los populares. Palabras que contrastan con la opinión de Rajoy, partidario de votar a favor del nuevo texto constitucional europeo. Poco ha tardado el partido socialista en utilizar a su favor las manifestaciones de Aznar. Su secretaria de Política Internacional quiere saber si la posición del PP ante la aprobación del texto constitucional es la de Aznar o la de Rajoy, "porque una es contraria a la otra", por lo que estima que es "urgente" que los populares "aclaren" su postura ante este extremo.