Pues tiene toda la razón del mundo. Ocurre que no dijo lo mismo cuando fue presidente y eso suena ahora a incongruencia. Pero es bien cierto que, hoy día, con diecisiete autonomías dilapidando, España no podrá competir ni con los moros del otro lado del Estrecho, donde el 50% son analfabetos (pobres moros). No digamos ya con nuestros cofrades de la UE.