L D (Agencias) En una entrevista en Televisión Española, el presidente Aznar expresó su opinión sobre las declaraciones de los dirigentes del PNV en el Día de la Patria Vasca, el pasado domingo, y dijo que no hay ningún conflicto entre vascos y españoles por mucho que se intente presentar de esta forma, para destacar que el único problema del País Vasco es el terrorismo y que muchos de sus ciudadanos no se puedan manifestar en libertad. Para él, "es difícil encontrar un momento en el que los dirigentes políticos del PNV hayan llegado a tanto grado de extremismo, de radicalidad y agresividad en sus posiciones y manifestaciones".
"No se pueden analizar racionalmente esas cosas que se están diciendo, que parecen más bien fruto de una obsesión que de una posición política", añadió Aznar, quien señaló que propuestas como la del lehendakari "no es que sólo no quepan en la Constitución" y busquen la "secesión" del país, sino que tampoco caben en Europa. Así señaló que lo han expresado ya la Comisión Europea y el Parlamento Europeo y lo dirá la Convención que analiza el futuro de las instituciones comunitarias. Tampoco cabe, a su juicio, en los deseos de una mayoría del pueblo vasco, que desea la pluralidad y manifestarse en libertad. "Todo lo demás me parece un ejercicio de extremismo realmente inconcebible", añadió Aznar.
Advertencia al PSOE
El presidente también dijo que desde el Gobierno no se va a responder a los nacionalistas de la misma forma que ellos hacen, sino asentando los consensos básicos fundamentados en la Constitución y los Estatutos. En este sentido, Aznar destacó que es importante que el pacto antiterrorista se mantenga en el futuro, así como que haya una alternativa al nacionalismo, y, al hilo de ello, calificó de "curioso" que los dirigentes nacionalistas deslegitimen lo que les ha permitido gobernar durante veinticinco años. Ante la posibilidad de acuerdos del PNV con el PSOE tras los comicios del 25 de mayo, expresó su confianza en que "nadie tenga tentaciones de pactar con aquellos que hacen de la ruptura de juego su modus vivendi, su causa y su razón de ser".
Respecto a las peticiones de CiU de un nuevo Estatuto de autonomía en Cataluña, Aznar insistió en que los últimos veinticinco años en España han sido "la historia de un éxito" que en gran parte se debe al pacto constitucional. En consecuencia consideró que "el riesgo mayor que tiene España es que donde hay estabilidad pongamos inestabilidad, donde hay proyección internacional pongamos aislamiento y donde hay prosperidad pongamos estancamiento". Tras subrayar que no hay motivos para poner en cuestión el pacto de convivencia, dijo respetar las iniciativas políticas que se presenten, pero expresó su convicción de que no es bueno para España abrir lo que quedó estabilizado en la Constitución.
La oposición ha querido deslegitimar al Gobierno
Tras elogiar los logros económicos de España en los últimos años, Aznar se mostró optimista ante el futuro del país porque dijo confiar en la capacidad de los españoles. Sin embargo, esta confianza no es la misma cuando el presidente habló de la oposición. Aunque reiteró la disposición del Gobierno a mantener la "mano tendida" a los partidos opositores, también advirtió de que es difícil cualquier diálogo si PSOE e IU deslegitiman al Gobierno, actitud que, según Aznar, han mantenido en los últimos meses, sobre todo como consecuencia de la crisis de Irak. "Creo que partidos como el socialista y el comunista, que se deslizan al radicalismo, cometen un grave error porque no está ahí el sentimiento mayoritario de los ciudadanos ni los intereses del país", dijo Aznar.
El presidente, que se mostró en todo momento optimista, también dijo que no hay ninguna razón para que revise su decisión de no presentarse a la reelección y agregó que algunas veces se ha destacado de él su habilidad para formar equipos, afirmando a continuación que el PP los tiene muy buenos. "Siempre se ha demostrado, y especialmente en las últimas semanas, en situaciones de crisis, que hay un partido que es una garantía de estabilidad para España", dijo Aznar. Rechazó que el resultado de las elecciones municipales y autonómicas del 25 de mayo pueda cambiar el calendario previsto para su sucesión y ante los sondeos desfavorables al PP recordó otras encuestas que se equivocaron en comicios anteriores y se mostró convencido de que los españoles saben valorar las posiciones políticas serias.
"No se pueden analizar racionalmente esas cosas que se están diciendo, que parecen más bien fruto de una obsesión que de una posición política", añadió Aznar, quien señaló que propuestas como la del lehendakari "no es que sólo no quepan en la Constitución" y busquen la "secesión" del país, sino que tampoco caben en Europa. Así señaló que lo han expresado ya la Comisión Europea y el Parlamento Europeo y lo dirá la Convención que analiza el futuro de las instituciones comunitarias. Tampoco cabe, a su juicio, en los deseos de una mayoría del pueblo vasco, que desea la pluralidad y manifestarse en libertad. "Todo lo demás me parece un ejercicio de extremismo realmente inconcebible", añadió Aznar.
Advertencia al PSOE
El presidente también dijo que desde el Gobierno no se va a responder a los nacionalistas de la misma forma que ellos hacen, sino asentando los consensos básicos fundamentados en la Constitución y los Estatutos. En este sentido, Aznar destacó que es importante que el pacto antiterrorista se mantenga en el futuro, así como que haya una alternativa al nacionalismo, y, al hilo de ello, calificó de "curioso" que los dirigentes nacionalistas deslegitimen lo que les ha permitido gobernar durante veinticinco años. Ante la posibilidad de acuerdos del PNV con el PSOE tras los comicios del 25 de mayo, expresó su confianza en que "nadie tenga tentaciones de pactar con aquellos que hacen de la ruptura de juego su modus vivendi, su causa y su razón de ser".
Respecto a las peticiones de CiU de un nuevo Estatuto de autonomía en Cataluña, Aznar insistió en que los últimos veinticinco años en España han sido "la historia de un éxito" que en gran parte se debe al pacto constitucional. En consecuencia consideró que "el riesgo mayor que tiene España es que donde hay estabilidad pongamos inestabilidad, donde hay proyección internacional pongamos aislamiento y donde hay prosperidad pongamos estancamiento". Tras subrayar que no hay motivos para poner en cuestión el pacto de convivencia, dijo respetar las iniciativas políticas que se presenten, pero expresó su convicción de que no es bueno para España abrir lo que quedó estabilizado en la Constitución.
La oposición ha querido deslegitimar al Gobierno
Tras elogiar los logros económicos de España en los últimos años, Aznar se mostró optimista ante el futuro del país porque dijo confiar en la capacidad de los españoles. Sin embargo, esta confianza no es la misma cuando el presidente habló de la oposición. Aunque reiteró la disposición del Gobierno a mantener la "mano tendida" a los partidos opositores, también advirtió de que es difícil cualquier diálogo si PSOE e IU deslegitiman al Gobierno, actitud que, según Aznar, han mantenido en los últimos meses, sobre todo como consecuencia de la crisis de Irak. "Creo que partidos como el socialista y el comunista, que se deslizan al radicalismo, cometen un grave error porque no está ahí el sentimiento mayoritario de los ciudadanos ni los intereses del país", dijo Aznar.
El presidente, que se mostró en todo momento optimista, también dijo que no hay ninguna razón para que revise su decisión de no presentarse a la reelección y agregó que algunas veces se ha destacado de él su habilidad para formar equipos, afirmando a continuación que el PP los tiene muy buenos. "Siempre se ha demostrado, y especialmente en las últimas semanas, en situaciones de crisis, que hay un partido que es una garantía de estabilidad para España", dijo Aznar. Rechazó que el resultado de las elecciones municipales y autonómicas del 25 de mayo pueda cambiar el calendario previsto para su sucesión y ante los sondeos desfavorables al PP recordó otras encuestas que se equivocaron en comicios anteriores y se mostró convencido de que los españoles saben valorar las posiciones políticas serias.