(Libertad Digital) La sesión de control de este miércoles ha comenzado con otra representación ensayada de los diputados de IU exhibiendo pancartas contra la guerra. Gaspar Llamazares, en su tono habitual de discurso, acusó a Aznar de convertirse en cómplice de lo que a su juicio será un drama humano en Irak. Pero Aznar le pide que “no derrame lágrimas y las guarde para las víctimas que ha provocado Sadam”.
Zapatero inició su intervención basándose en los informes de Blix y El Baradei acusando a Aznar de reducir a días el plazo que solicitan para continuar los trabajos de inspección. Le pregunta por qué le niega autoridad a Blix pese a que la semana pasada le acusó de escudarse en los inspectores. Entonces Aznar le reprochó no creer ni en las resoluciones ni en los inspectores. Zapatero sostiene que EEUU, Reino Unido y España no han presentado pruebas de la relación entre Irak y “el terrorismo mal llamado islámico”. Tras ello, el líder socialista advierte a Aznar de que ha perdido toda credibilidad. Así, le insta a que “abandone su posición: "Vote a favor de las tesis de Blix y no de Bush, vote con la Europa cercana y la legalidad”.
La respuesta del presidente del Gobierno fue la ya repetida en otras ocasiones. Eso sí, hizo un inciso para recordar a Zapatero que “ya sabemos que van a ir de pancarta otra vez pero no hace falta que adelante su discurso”. Tras esto, Aznar recordó que la resolución 1441 no obliga a nadie a presentar pruebas salvo a Sadam Husein. En este sentido, acusa a Zapatero de “olvidar en los discursos y en las pancartas” al único que tiene que demostrar algo que es Sadam Husein. Añade Aznar que “el problema es que no se quieren deshacer de las armas y usted nos pide que aliviemos la presión” que es, puntualiza Aznar, lo que busca Sadam. Concluyó augurando que “no habrá un mundo más inseguro que un mundo en el que no se respeta la ley” y añadió que si conseguimos evitarlo “no habrá nada que tengamos que agradecerle”, en referencia a la postura que mantiene el PSOE.
La ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio , lamentó la "enorme satisfacción" que debe sentir Sadam Husein al conseguir "dividir a la comunidad internacional" y "debilitar al Consejo de Seguridad de la ONU" y advirtió de que el Gobierno español no contribuirá a este tipo de operaciones. Palacio respondió así en el pleno del Congreso a una interpelación del diputado de IU José Luis Centella, que exigió conocer cuál es el operativo preparado en España para una ofensiva militar en Irak y reprochó a la ministra que interprete la resolución 1441 de la ONU de manera distinta a la mayoría de los países firmantes y al propio secretario general de Naciones Unidas.
Palacio aseguró asimismo que el Gobierno, lejos de "despreciar" a la ONU, se esfuerza precisamente en preservar su papel central en las relaciones internacionales y negó que el Ejecutivo español interprete de forma particular la resolución 1441, ya que en ella se habla claramente de "última oportunidad" para el régimen de Sadam Husein y se exige su "desarme total".
Zapatero inició su intervención basándose en los informes de Blix y El Baradei acusando a Aznar de reducir a días el plazo que solicitan para continuar los trabajos de inspección. Le pregunta por qué le niega autoridad a Blix pese a que la semana pasada le acusó de escudarse en los inspectores. Entonces Aznar le reprochó no creer ni en las resoluciones ni en los inspectores. Zapatero sostiene que EEUU, Reino Unido y España no han presentado pruebas de la relación entre Irak y “el terrorismo mal llamado islámico”. Tras ello, el líder socialista advierte a Aznar de que ha perdido toda credibilidad. Así, le insta a que “abandone su posición: "Vote a favor de las tesis de Blix y no de Bush, vote con la Europa cercana y la legalidad”.
La respuesta del presidente del Gobierno fue la ya repetida en otras ocasiones. Eso sí, hizo un inciso para recordar a Zapatero que “ya sabemos que van a ir de pancarta otra vez pero no hace falta que adelante su discurso”. Tras esto, Aznar recordó que la resolución 1441 no obliga a nadie a presentar pruebas salvo a Sadam Husein. En este sentido, acusa a Zapatero de “olvidar en los discursos y en las pancartas” al único que tiene que demostrar algo que es Sadam Husein. Añade Aznar que “el problema es que no se quieren deshacer de las armas y usted nos pide que aliviemos la presión” que es, puntualiza Aznar, lo que busca Sadam. Concluyó augurando que “no habrá un mundo más inseguro que un mundo en el que no se respeta la ley” y añadió que si conseguimos evitarlo “no habrá nada que tengamos que agradecerle”, en referencia a la postura que mantiene el PSOE.
La ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio , lamentó la "enorme satisfacción" que debe sentir Sadam Husein al conseguir "dividir a la comunidad internacional" y "debilitar al Consejo de Seguridad de la ONU" y advirtió de que el Gobierno español no contribuirá a este tipo de operaciones. Palacio respondió así en el pleno del Congreso a una interpelación del diputado de IU José Luis Centella, que exigió conocer cuál es el operativo preparado en España para una ofensiva militar en Irak y reprochó a la ministra que interprete la resolución 1441 de la ONU de manera distinta a la mayoría de los países firmantes y al propio secretario general de Naciones Unidas.
Palacio aseguró asimismo que el Gobierno, lejos de "despreciar" a la ONU, se esfuerza precisamente en preservar su papel central en las relaciones internacionales y negó que el Ejecutivo español interprete de forma particular la resolución 1441, ya que en ella se habla claramente de "última oportunidad" para el régimen de Sadam Husein y se exige su "desarme total".