(Libertad Digital) El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha intervenido este lunes ante un millar de empresarios en el Foro de la Nueva Economía en Barcelona y se ha preguntado por las razones "para poner en riesgo 25 años de éxito político" basados en el marco constitucional.
En la conferencia y en el posterior coloquio, el presidente del Gobierno ha advertido que el Ejecutivo se opondrá "tanto política como jurídicamente, con todas sus consecuencias" a la "iniciativa unilateral y de ruptura" del lehendakari vasco. Aznar ha iniciado su intervención con una mención "no deseada" al Plan Ibarretxe, que ha calificado de "desafío al conjunto de la sociedad española", y del que ha afirmado que "no pueden cerrarse los ojos ante elementos que no pueden olvidarse, como la amenaza terrorista que le acompaña".
Por ello ha pedido una "activa movilización, pacífica pero firme, tan extensa como resuelta" de la sociedad, "y específicamente de la catalana", contra esta iniciativa que, a su juicio, "no ha respetado las reglas del juego, por lo que deberá afrontar las consecuencias". La "iniciativa unilateral de ruptura política" del ejecutivo vasco supone que podría ser aprobada por el parlamento de esa comunidad "con el apoyo de una banda terrorista".
Posteriormente, en el coloquio, ha retomado esta cuestión al afirmar que "plantear un plan de secesión de una parte de España encima de mil muertos que ha conseguido el terrorismo en los últimos años en España es una de las mayores barbaridades que se pueden conocer no sólo en nuestro país, sino en toda Europa. A nadie se le ha ocurrido semejante disparate". Para Aznar, la aprobación del Plan Ibarretxe "supondría la salida irremisible del País Vasco de España y Europa" y ha añadido que pretende "la demolición del edificio de estabilidad institucional que ha supuesto la Constitución, que ha permitido los mejores 25 años de la historia contemporánea de España".
En la conferencia y en el posterior coloquio, el presidente del Gobierno ha advertido que el Ejecutivo se opondrá "tanto política como jurídicamente, con todas sus consecuencias" a la "iniciativa unilateral y de ruptura" del lehendakari vasco. Aznar ha iniciado su intervención con una mención "no deseada" al Plan Ibarretxe, que ha calificado de "desafío al conjunto de la sociedad española", y del que ha afirmado que "no pueden cerrarse los ojos ante elementos que no pueden olvidarse, como la amenaza terrorista que le acompaña".
Por ello ha pedido una "activa movilización, pacífica pero firme, tan extensa como resuelta" de la sociedad, "y específicamente de la catalana", contra esta iniciativa que, a su juicio, "no ha respetado las reglas del juego, por lo que deberá afrontar las consecuencias". La "iniciativa unilateral de ruptura política" del ejecutivo vasco supone que podría ser aprobada por el parlamento de esa comunidad "con el apoyo de una banda terrorista".
Posteriormente, en el coloquio, ha retomado esta cuestión al afirmar que "plantear un plan de secesión de una parte de España encima de mil muertos que ha conseguido el terrorismo en los últimos años en España es una de las mayores barbaridades que se pueden conocer no sólo en nuestro país, sino en toda Europa. A nadie se le ha ocurrido semejante disparate". Para Aznar, la aprobación del Plan Ibarretxe "supondría la salida irremisible del País Vasco de España y Europa" y ha añadido que pretende "la demolición del edificio de estabilidad institucional que ha supuesto la Constitución, que ha permitido los mejores 25 años de la historia contemporánea de España".