L D (EFE) Según comentó en una entrevista ofrecida por Radio Euskadi y recogida por Efe, "que alguien se los quede y que alardee de que los tiene y de que no los trasladará a la comisión que investiga los hechos, es inadmisible", y añadió que "Aznar ha hecho mucho daño al conjunto del Estado cuando estaba en el Gobierno y, en estos momentos, más que daño, está haciendo el ridículo"
Sobre la posibilidad de que el CNI haya espiado a políticos vascos y catalanes, Azkarraga consideró "absolutamente inadmisible que esos servicios se utilicen para ese tipo de prácticas y no para otras cosas en las que sí debían haber sido utilizados, como por ejemplo, para prevenir los atentados" de Madrid. El consejero vasco, reclamó la transferencia de las instituciones penitenciarias y lamentó que "el Gobierno del PSOE se esté negando por razones estrictamente políticas, pero no porque el Estatuto diga que no deben ser transferidas, y me parece que es un error". Según reclamó, "agilícese el traspaso de la transferencia, y tenga la seguridad de que sabremos hacer frente a un problema importante como es la situación de las prisiones en el País Vasco".
Azkarraga opinó que, cuando se gestione dicha competencia desde el Gobierno Vasco, se debería comenzar remodelando y modernizando las cárceles para tratar de evitar el problema de la masificación y, si después se comprobase que hace falta, se podría plantear la construcción de un nuevo centro. De la misma manera confió "en las posiciones progresistas del Partido Socialista por su propia trayectoria histórica y no tendría sentido que continuara con la misma política penitenciaria que ha mantenido el PP". Reclamó "la humanización del tratamiento a los presos, sean de carácter social o por pertenencia a una banda terrorista, para que cumplan su pena cerca de su lugar de residencia y no se abuse de la prisión provisional como ocurre con "un colectivo importante de personas que no son ETA, y no saben por qué están ahí", en referencia a directivos de los diarios clausurados Egunkaria y Egin.
Sobre la posibilidad de que el CNI haya espiado a políticos vascos y catalanes, Azkarraga consideró "absolutamente inadmisible que esos servicios se utilicen para ese tipo de prácticas y no para otras cosas en las que sí debían haber sido utilizados, como por ejemplo, para prevenir los atentados" de Madrid. El consejero vasco, reclamó la transferencia de las instituciones penitenciarias y lamentó que "el Gobierno del PSOE se esté negando por razones estrictamente políticas, pero no porque el Estatuto diga que no deben ser transferidas, y me parece que es un error". Según reclamó, "agilícese el traspaso de la transferencia, y tenga la seguridad de que sabremos hacer frente a un problema importante como es la situación de las prisiones en el País Vasco".
Azkarraga opinó que, cuando se gestione dicha competencia desde el Gobierno Vasco, se debería comenzar remodelando y modernizando las cárceles para tratar de evitar el problema de la masificación y, si después se comprobase que hace falta, se podría plantear la construcción de un nuevo centro. De la misma manera confió "en las posiciones progresistas del Partido Socialista por su propia trayectoria histórica y no tendría sentido que continuara con la misma política penitenciaria que ha mantenido el PP". Reclamó "la humanización del tratamiento a los presos, sean de carácter social o por pertenencia a una banda terrorista, para que cumplan su pena cerca de su lugar de residencia y no se abuse de la prisión provisional como ocurre con "un colectivo importante de personas que no son ETA, y no saben por qué están ahí", en referencia a directivos de los diarios clausurados Egunkaria y Egin.