(Libertad Digital) Tras haber prometido su cargo como nuevo consejero de Interior del Gobierno Vasco y en su primera comparecencia ante los medios de comunicación, Rodolfo Ares, ha señalado que su objetivo prioritario es la lucha contra ETA. “Nuestra principal tarea será combatir a ETA”, ha explicado.
Según ha subrayado Ares, en este Gobierno “no habrá espacios de impunidad para los terroristas ni sus colaboradores”. Por ello, el nuevo consejero de Interior vasco apuesta por reforzar el papel de la Ertzaintza esta legislatura así como la colaboración con otros cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
Asimismo, Ares que para lograr el fin de la violencia terrorista “buscaremos la unidad de todos los partidos democráticos”. “Tenemos que decirle alto y claro a ETA que no conseguirán ninguna de sus pretensiones”, ha añadido.
Por otra parte, el socialista ha tenido un recuerdo en su primera comparecencia como consejero de Interior con las víctimas del terrorismo. Ares, que ha querido adquirir un "compromiso" con las víctimas en la lucha contra los asesinos, ha recordado especialmente a los ertzainas asesinados por ETA, de quienes ha dicho que "su memoria y sacrificio será siempre un acicate para todos aquellos que trabajamos en el departamiento del Interior".
En el escenario personal, un emocionado Rodolfo Ares se ha dirigido a sus padres para agradecer su "sacrifico" para que "un niño que nació en una humilde aldea gallega, criado en Otxarkoaga pueda ser hoy consejero". A su esposa, Rosa, le ha agradecido ser su "ancla" y su "principal apoyo", mientras que a sus dos hijos, Marta y Javier, les ha dicho que su mayor deseo es "poder sentarme un día con vosotros para celebrar que la violencia, el fanatismo y la intolerancia han desaparecido de Euskadi".
Asimismo, ha destacado el "buen trabajo" realizado por Balza, de quien ha dicho que es un "político de talla, dialogante y de firmes convicciones democráticas".
Por su parte, Javier Balza ha deseado a su sucesor "la mayor de la suertes" en su trabajo, al tiempo que ha reconocido que durante el desarrollo de su cargo "ha habido momento malos, malísimos, y buenos, pero muy pocos buenísimos".