L D (Europa Press) En una entrevista concedida a ETB, el responsable de Aralar se felicitó de que el juez de la Audiencia Nacional dejara ayer en libertad al dirigente de Batasuna-ETA, Arnaldo Otegi, y a otros siete responsables de la formación ilegalizada, pero destacó "un detalle incomprensible, como es el de Joseba Permach", que debe comparecer diariamente ante la policía vasca y tiene prohibido salir de territorio nacional.
Basabe incluyó esta decisión judicial, que "ni cercena ni coarta", dentro del "cambio de percepción de realidad social y el futuro que se espera" para Euskadi, porque "al final, poco a poco, nadie, ni siquiera la Audiencia Nacional, es impermeable a la realidad". El responsable de Aralar criticó, sin embargo, que "desde hace ya muchos años, la Audiencia Nacional es bastante imprevisible en sus decisiones, que muchas veces no se entienden desde la lógica jurídica y son bastante aleatorias, dispersas".
Además, rechazó que la resolución de Grande-Marlaska "tenga capacidad de abrir un ciclo nuevo", pero mostró su esperanza en que "abra un camino en el que los jueces dejen de estar presentes en la política, algo que cae por su propio peso, pero que en la realidad no es así. Este debería ser el camino para que los jueces, por fin, especialmente los de la Audiencia Nacional, no se inmiscuyan en política".
Basabe también denunció cómo "Rajoy y varios medios de comunicación vienen incitando a una ofensiva contra Batasuna y propugnando casi la santidad el juez Marlaska", al que califican "como el último bastión de la democracia". "Eso demuestra que hay sectores que se han acostumbrado a que los jueces hagan política, porque la hacen en los términos que a ellos les convienen. Es algo que debe acabar", concluyó.