L D (Agencias) ANV dijo que el PP "no es bienvenido" en Lizarza porque sus dirigentes populares están en esta localidad guipuzcoana para "insultar, menospreciar y burlarse" del pueblo y de sus vecinos. ANV, que se niega a condenar los atentados de ETA, considera un insulto izar la bandera española. Tanto, que a Regina Otaola le ha llegado una amenaza directa: "Vas a morir".
ANV difundió esta tarde una nota en euskera en la que opina sobre los incidentes ocurridos en el municipio cuando la alcaldesa, Regina Otaola (PP), tras un pleno, presidió la izada de las banderas española, vasca y local en el balcón consistorial, con motivo de las fiestas que celebra estos días la localidad. La Ertzaintza abrió diligencias policiales contra dos personas que participaron en una concentración de protesta frente al consistorio, una por amenazar verbalmente de muerte a la alcaldesa, quien presentó denuncia formal en comisaría, y la otra por un supuesto delito de injurias a la primera edil en un cartel que portaba.
En su comunicado, ANV considera que en las últimas elecciones del 27 de mayo el pueblo de Lizarza "se pronunció claramente", en referencia a los 186 votos nulos que reclaman como suyos, y con los que hubieran ganado al PP, que fue la única candidatura que se presentó y obtuvo 27 votos. A juicio de ANV, el PP "robó y se apropió de la Alcaldía de Lizarza en contra de la voluntad de sus vecinos, como en la época de Franco".
Agregó que dicho partido se ha personado en la localidad guipuzcoana para "provocar" a la población en sus fiestas y para "imponer" la bandera española, que para este municipio es "extranjera". ANV condenó además el hecho de que dos vecinos del pueblo hayan sido objeto de diligencias policiales, quienes, según informó, declararán ante el juez el próximo miércoles, así como la actuación de la Ertzaintza, que "ha permitido la imposición antidemocrática" y "ha protegido" a los populares.
Hizo por último un llamamiento a los vecinos de la localidad a continuar durante las fiestas del pueblo "impulsando sus reivindicaciones" y "respondiendo a las provocaciones antidemocráticas".
ANV difundió esta tarde una nota en euskera en la que opina sobre los incidentes ocurridos en el municipio cuando la alcaldesa, Regina Otaola (PP), tras un pleno, presidió la izada de las banderas española, vasca y local en el balcón consistorial, con motivo de las fiestas que celebra estos días la localidad. La Ertzaintza abrió diligencias policiales contra dos personas que participaron en una concentración de protesta frente al consistorio, una por amenazar verbalmente de muerte a la alcaldesa, quien presentó denuncia formal en comisaría, y la otra por un supuesto delito de injurias a la primera edil en un cartel que portaba.
En su comunicado, ANV considera que en las últimas elecciones del 27 de mayo el pueblo de Lizarza "se pronunció claramente", en referencia a los 186 votos nulos que reclaman como suyos, y con los que hubieran ganado al PP, que fue la única candidatura que se presentó y obtuvo 27 votos. A juicio de ANV, el PP "robó y se apropió de la Alcaldía de Lizarza en contra de la voluntad de sus vecinos, como en la época de Franco".
Agregó que dicho partido se ha personado en la localidad guipuzcoana para "provocar" a la población en sus fiestas y para "imponer" la bandera española, que para este municipio es "extranjera". ANV condenó además el hecho de que dos vecinos del pueblo hayan sido objeto de diligencias policiales, quienes, según informó, declararán ante el juez el próximo miércoles, así como la actuación de la Ertzaintza, que "ha permitido la imposición antidemocrática" y "ha protegido" a los populares.
Hizo por último un llamamiento a los vecinos de la localidad a continuar durante las fiestas del pueblo "impulsando sus reivindicaciones" y "respondiendo a las provocaciones antidemocráticas".