Antonio Chaves seguía ejerciendo de apoderado al recibir dinero de la Junta

(Libertad Digital) En el año 2005 el director general de Tecnología e Infraestructuras Deportivas de la Junta, Leonardo Chaves, adjudicó un contrato a una empresa, Climo Cubierta, en la que había sido apoderado su hermano mayor Antonio José Chaves. Ambos son, por supuesto, hermanos del por entonces presidente de la Junta, Manuel Chaves.

Cuando este caso llegó a la Justicia por la evidente vinculación entre el político que concedía el contrato y el directivo de la empresa, los jueces exculparon a Leonardo porque Antonio José había dejado de ser apoderado de la compañía en marzo del 2004. De hecho, ese fallo se ha utilizado para contrastarlo con la actuación de otro Chaves, Manuel, cuando firmó la subvención a la empresa, MATSA, de la que su hija era (y es) apoderada.

Sin embargo, el diario El Mundo revela este lunes que Antonio José Chaves habría seguido ejerciendo de apoderado de Climo Cubierta, en lugar de trabajar sólo como asesor externo como habría declarado la empresa.

Así se desprende de un documento que obra en poder del periódico, concretamente un fax enviado desde el ayuntamiento de Ceutí, en Murcia, que demuestra que pese a que había dejado de ser apoderado 13 meses antes seguía recibiendo personalmente comunicaciones de carácter institucional propias de un directivo, y no de un asesor externo.

Además, Antonio Chaves había dejado de ser formalmente apoderado diez meses antes de que se iniciase el concurso para esa obra, por lo que no se podría aducir que desde el ayuntamiento se habría mandado por error un fax a un directivo que habría dejado de serlo en mitad del procedimiento.