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Antich no descarta adelantar elecciones si no logra la estabilidad

El presidente del Gobierno balear, Francesc Antich, no da aún por roto el pacto de gobernabilidad, si bien no descartó convocar elecciones anticipadas como "última alternativa", en caso de que no se logre "recomponer la estabilidad".

Para ello este viernes se reunirá con todas las fuerzas políticas, incluida el PP, de cara a "sumar esfuerzos" para lograr un gobierno en el Ayuntamiento de Palma, el Consejo de Mallorca y el Ejecutivo balear que sea "fuerte, eficiente y sin problemas". Tras la reunión de la Ejecutiva del PSIB, Antich admitió que el pacto, firmado entre el PSIB, UM y Bloc, que afecta a las tres citadas instituciones, está pasando por "dificultades muy graves" y, tras ser preguntado si romperá el acuerdo de gobernabilidad, dijo que "entre pasado mañana y el otro os podré contestar", tras el encuentro que mantenga con el PSIB y UM, así como con los 'populares', con el objetivo de "sumar el máximo de esfuerzos".

"Las elecciones anticipadas lo dejo para lo último de todo", remarcó Antich, al tiempo que manifestó que en estos momentos de dificultad económica, su prioridad es aprobar los Presupuestos para el 2010, para lo cual pedirá "responsabilidad a cada uno de los grupos". "Será muy difícil transitar por el 2010 si no se alcanza un acuerdo respecto a los Presupuestos, que son la herramienta principal para dar respuesta a los ciudadanos", aseveró.

Así, insistió en que las instituciones necesitan la "estabilidad necesaria" para afrontar la crisis económica, así como la "máxima transparencia respecto al funcionamiento de las instituciones", cuestión esta última que admitió que le "preocupa", teniendo en cuenta que "una parte de los graves problemas" por los que está pasando UM "se deriva de esta situación", refiriéndose así a la imputación de varios de los dirigentes de este partido en casos de corrupción.  

Preguntado sobre si el PSIB actuará de igual manera en el Ayuntamiento de Palma, en el Consejo de Mallorca y el Gobierno Antich señaló que su partido tendrá una "única acción" en las tres instituciones y reconoció que, en caso de que finalmente no logre un acuerdo con sus socios o con el PP respecto a los Presupuestos, será una situación "muy dura" para la Comunidad Autónoma.

El presidente del Gobierno balear indicó que no todas las fuerzas políticas "tienen el mismo peso" y anunció que, tras la dimisión esta mañana de Miquel Nadal, no nombrará a un nuevo consejero de Turismo hasta que finalicen las conversaciones con todos las formaciones con representación en el Parlamento, que "no se alargarán". Asimismo, recordó que "siempre queda la posibilidad de someterme a una moción de confianza, pero estamos en la idea de sumar el máximo de esfuerzos" para evitar esta situación.

Preguntado sobre si está dispuesto a continuar gobernando con el consejero de Medio Ambiente, Miquel Ángel Grimalt, tras ser imputado en una pieza separada del caso Son Oms, conocida como la Operación Maquillaje, Antich indicó que "hay que ver qué tipos de imputaciones son" y, en este sentido, recordó que el PSIB también tiene imputados en algunas instituciones, en referencia al presidente del Consejo de Ibiza, Xico Tarrés, imputado en el caso Eivissa Centre.

Por otra parte, apuntó que la situación de "dificultad" por la que está atravesando el pacto de gobernabilidad en el que "no existe estabilidad" va "un poco más allá" de la dimisión de Nadal, razón por la cual "necesitamos sentarnos con las distintas fuerzas políticas".

Preguntado sobre si está dando un ultimátum a sus socios de Gobierno, en el sentido de que si no se alcanza un acuerdo se convocarán elecciones anticipadas, Antich reconoció que "no me gusta este titular", al tiempo que insistió en que su intención es lograr una estabilidad en todas las instituciones para dar una "respuesta clara y rápida" a la situación de dificultad económica por la que están atravesando los ciudadanos.

"Necesitamos instituciones fuertes y estables que hagan posible ejecutar el Pacto por la Competitividad acordado con los sindicatos y empresarios y el cambio de modelo económico", aseveró Antich, quien lamentó la "desafección y el alejamiento hacia la política que existe en muchos ciudadanos por una serie de distintas causas que afectan a algunas instituciones en relación a la legislatura pasada".

A esta situación, según dijo, hay que añadirle otra serie de problemas que han surgido en las diferentes instituciones, entre las que citó el Ayuntamiento de Palma, donde en el último Pleno, el equipo de Gobierno perdió algunas votaciones, mientras que en el Consejo de Mallorca hubo una "crisis" hace un mes y en el Gobierno "ya vamos por el tercer consejero de Turismo en esta legislatura, cuando es la principal actividad económica de nuestro país".

De este modo, consideró "necesario reconducir esta situación" y agregó que debe haber un "cambio radical" en la manera de trabajar por parte del Bloc y UM, con el objetivo de "emplear todas las energías" en dar respuestas a los ciudadanos dejando de lado los intereses "partidistas".

"No puede ser que tengamos la inestabilidad que hemos tenido, debido a problemas internos de algunas de las formaciones políticas que componen el Gobierno", zanjó Antich, quien remarcó que "estamos en una situación muy singular y especial, por lo que ésta no es una legislatura cualquiera, debido a la crisis económica y la crisis de confianza de los ciudadanos". Por tanto, Antich avanzó que "invitará" al Bloc, UM y PP para que "entre todos, podamos vencer la crisis económica y podamos adoptar acuerdos que posibiliten que haya mucha más transparencia desde el trabajo de cada una de las instituciones".

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