Uno de ellos es el que publica este lunes el periodista Manuel Cerdán en La Gaceta. Se trata de una declaración de José Amedo en la comisaría de Chamartín de Madrid, hecha en abril de 1998, y en la que volvía a acusar al gobierno de Felipe González de estar detrás de los GAL y de presionarle para que callara. El documento nunca llegó al juez.
Según explica Cerdán, en pleno proceso por el asesinato del dirigente de HB Santiago Brouard, en Bilbao, Amedo fue requerido para que declarara en Madrid por una denuncia de Julián Sancristóbal contra él. El ex algo cargo socialista le acusaba de intentar chantajearle: Amedo le habría dicho si "no le aflojaban la gallina" hablaría. Sin embargo, en su declaración el policía dijo justo lo contrario: que habría sido Sancristóbal quien le dijo que "como consecuencia de su sacrificio", es decir, su paso por la cárcel, "sería indultado por el gobierno socialista después de dos años en prisión".
Amedo también contó que en 1993, en un permiso penitenciario, Sancristóbal le llevó al despacho de Eligio Hernández, el entonces fiscal general del Estado, para coaccionarle y hacerle "promesas en nombre de Felipe González". En el documento, queda recogido también que Sancristóbal le habría ofrecido "cuarenta millones de pesetas que tenía en una bolsa", según el testimonio de Amedo.
Cerdán recuerda que lo dicho por el policía coincide con la existencia en la época de una especie de gabinete de crisis, que habría estado capitaneado por Rubalcaba y que tenía como fin tratar de acallar a Amedo y Domínguez en su intento de salvar al Gobierno de las acusaciones de estar tras los GAL. Según el periodista, el tema del terrorismo de Estado es "un pozo sin fondo" que aún puede acarrear muchas sorpresas. Y algunos de sus crímenes, recuerda, aún no han prescrito.