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Alonso reconoce la bronca Gómez-Rubalcaba, pero niega amenazas

El portavoz del PSOE en el Congreso ha confirmado el episodio que se vivió este lunes en la calle Ferraz cuando Rubalcaba amenazó a Tomás Gómez con "consecuencias". Según Alonso, no fueron amenazas y que, en cualquier caso, éste no hablaba como ministro del Interior sino como socialista.

Nadie parece respaldar ya a Tomás Gómez; ni en privado ni en público. Por lo menos, ningún peso pesado del PSOE. Si este lunes la que fuera hasta hace poco su mayor defensora en el partido frente a Blanco –Leire Pajín– escenificaba su distanciamiento, ahora ha sido José Antonio Alonso.

El portavoz de los socialistas en el Congreso ha afirmado claramente y sin tapujos, a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, que su "preferencia es Trinidad Jiménez".

De esta manera ya no es un secreto a voces, sino una realidad a voces. Este lunes también Zapatero habló de preferencias. Y aunque todo el mundo sabía a quién se estaba refiriendo no fue tan claro como lo ha sido este martes José Antonio Alonso.

Fue precisamente en esa reunión – en la primera Ejecutiva Federal del PSOE tras el verano – donde el ministro del Interior amenazó al candidato madrileño. Rubalcaba advirtió a Gómez de que su pulso político a Zapatero "tendrá consecuencias".

Alonso también se ha referido a este rifirrafe al que ha tratado de restarle importancia. Según el portavoz socialista, Pérez Rubalcaba no amenazó a nadie sino que se limitó a expresar sus "preferencias". Y que en cualquier caso no habló como ministro del Interior sino como "destacado miembro del PSOE", ha dicho Alonso.

Tras revelar públicamente su "preferencia", el portavoz ha querido apuntar también que el partido finalmente "cerrará filas" con el vencedor, "gane quien gane".

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