(Libertad Digital) Ángel Acebes ha sido el encargado de hacer la primera valoración del principal partido de la oposición sobre la nueva Constitución europea. El secretario general adjunto del PP no está de acuerdo con la negociación de Zapatero en Bruselas. El resultado, ha dicho, "es insatisfactorio para España" y ha puesto un ejemplo claro: con las conclusiones de Niza España "formaba parte de los grandes de la UE y ahora ya no tenemos el mismo peso".
Un circunstancia que lleva a Acebes a la conclusión de que "las cosas no se han hecho bien y se ha renunciado a negociar en el terreno que más nos convenia a cambio de nada". Lo que ha hecho Zapatero,sostiene el PP, es una "concesión inexplicable" a la que hay que sumar otro fracaso del presidente del Gobierno. Zapatero llegaba a la cumbre defendiendo que la doble mayoría se definiera como "mitad más uno" de los países y "dos tercios" (66,66%) de la población. El texto aprobado este viernes define la doble mayoría como la combinación de "al menos" un 55 por ciento de los Estados miembros, con "al menos" el 65 por ciento de la población, pero precisando que el número de países que apoye la iniciativa no podrá ser menor de quince.
Ángel Acebes se ha lamentado por los desequilibrios que se van a generar en el Consejo a partir de ahora entre los países grandes y España, habida cuenta de que se van a incrementar las diferencias. "Teníamos el mismo peso que Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido y ahora Alemania tiene el doble que España y el resto el 50% más que nosotros", ha apuntado.
Para Acebes, esto es fruto de "una negociación débil y con torpeza" en la que tampoco España ha conseguido más eurodiputados. "Zapatero no ha traido ni un eurodiputado más", ha dicho el ex ministro. Pese al optimismo del presidente, que este viernes se apresuró a adelantar que España "ganará cuatro o cinco" escaños, Acebes ha aclarado que lo aprobado este viernes contempla que a partir de 2009 haya veinte nuevos eurodiputados, pero a repartir entre 27 países.
El dirigente del PP ha vuelto a recurrir a un claro ejemplo para demostrar la périda de poder de España. Con el Tratado de Niza, en el reparto de los fondos, España podía oponerse. Ahora no.