El ministro de Defensa, Pedro Morenés, aseguró este miércoles que "España no puede estar siempre a la cola de la responsabilidad" en las misiones internacionales y que el papel que debe desempeñar tanto en la Unión Europea como en la Alianza Atlántica debe ser, al menos, directamente proporcional a su peso económico, para poder ser tenida en cuenta en el escenario internacional.
"España tiene que estar en el mundo. Nuestros intereses como nación, de tipo político, económico y de seguridad, hoy se establecen en escenarios muy lejanos de lo que es el territorio nacional. La seguridad de España empieza mucho más lejos de lo que empezaba hace diez años y que hay que hacer frente a los escenarios reales y no pensar en el mundo que debería ser. Tiene que ser un socio fiable y fuerte, que pueda defenderse a sí mismo y mantener un nivel de disuasión suficiente", dijo.
Destacó que Estados Unidos está girando su política casi Oriente Medio y el área de Asia-Pacífico, y que tendrán que ser otras naciones las que se encarguen de la seguridad de la zona Atlántica. "Debe crecer la responsabilidad del resto", indicó. Precisamente, en este escenario, en el que pidió que España aumente su papel protagonista.
Durante la presentación de la Directiva de Defensa Nacional en la sede del ministerio, apuntó como las "principales focos de riesgo" para nuestro país las zonas del norte de África –pendientes todavía de cómo acaba los cambios producidos por la primavera árabe–, los países del Sahel –debido a la facilidad con la que se mueven grupos próximas a Al Qaeda– y el Golfo de Guinea –donde comienza a aparecer el negocio de la piratería naval–.
Morenés también habló de Hispanoamérica y el ciberterrorismo. Sobre el área geográfica, dijo que la "paz interestados" parece garantizada, pero que "el tráfico de drogas y el terrorismo pueden desestabilizar a los Estados". Respecto al terrorismo en Internet, recordó el sabotaje sufrido por algunas centrales nucleares iraníes en los últimos meses, y el peligro que ello conlleva.
Como viene siendo habitual desde que asumió la cartera, el ministro defendió la importancia estratégica de la industria de defensa. "España tiene que estar a la cabeza de algunas tecnologías y capacidades de defensa. No de todas porque no tenemos capacidad, pero sí de un buen número de ellas", dijo.
En lo que a las Fuerzas Armadas se refiere, volvió a insistir en la pérdida de importancia que ha tenido desde que fuese presentado a las altas esferas del ministerio el informe ‘Visión 2025’, sobre las capacidades que deberían tener los tres Ejército en esa fecha y que fue encargado al Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el almirante Fernando García Sánchez. "Tenemos que matizarlo en algunos aspectos", dijo.
En este sentido, afirmó que el Gobierno no escatimará esfuerzos para garantizar la seguridad. "Haremos todo lo que tengamos que hacer para que España no vea menguada su seguridad", tras lo que defendió que nunca se puede alcanzar un nivel de protección "ideal", para lo que puso como ejemplo los atentados terroristas del 11-S en Estados Unidos, donde se atacaron, entre otros objetivos, el Pentágono.
Por último, destacó la importancia de que la cultura de la defensa llegue hasta todos los ciudadanos españoles. "La sociedad debe entenderlo. La seguridad no se puede improvisar ni hacer sin un sustrato económico razonable", dijo, para añadir después que con los recursos económicos que hay debido a la crisis "no va a ser fácil".