Mariano Rajoy ha despedido al equipo olímpico en Moncloa en un acto plagado de periodistas. Con los mercados en rojo y la prima de riesgo pulverizando un nuevo récord, el presidente del Gobierno aprovechó su discurso, el único previsto para esta semana, para introducir menciones a la situación que atraviesa España, utilizando símiles deportivos.
"Me voy a aplicar, y estamos aplicándonos para superar esta situación, la misma medicina que aplican nuestros deportistas: trabajo, esfuerzo, dedicación y perseverancia. Cuando un deportista está lesionado le cuesta recuperarse y puede caer en el desánimo, pero lo supera inmediatamente. Eso es exactamente lo que vamos a hacer nosotros: trabajar y dar lo mejor de nosotros mismos para superar esta situación", ha dicho.
Tras felicitar a todos los deportistas y al Comité Olímpico y declararse "un gran aficionado al deporte", ha celebrado que España vaya a Londres con una "representación" de atletas "que dan la talla, que se han esforzado".
También ha ensalzado la importancia de los valores para el deporte y para "la sociedad": "Si la gente se esfuerza, si trabaja, si tiene espíritu, si tiene pundonor, le va a ir mucho mejor". "Estamos seguros de que seguiremos estando orgullosos de todos vosotros. España, una vez más, va a estar donde le corresponde, a la altura de las circunstancias".
El presidente del COE, Alejandro Blanco, también incluyó menciones a la crisis en un discurso que parecía destinado a animar al presidente. Vaticinó que "todos juntos lograremos éxitos", tanto deportivos como sociales y económicos. Añadió que los valores que mueven a los deportistas son los que "le han llevado a la presidencia del gobierno, a gobernar por el interés general", con medidas pensando en el futuro. "Eso hacen todos los deportistas: tienen presente el pasado", el "presente" y el "futuro que ya está aquí, que son los Juegos Olímpicos".