Después de la destitución de Carlos Dívar culminada esta semana, el CGPJ sigue acaparando titulares. Cada vocal del citado órgano judicial habría gastado una media de 22.000 euros en viajes durante el año pasado, 2011.
En total, cerca de medio millón de euros en viajes y atenciones protocolarias, una media de 22.411 euros gastados por cada uno de los 20 vocales y el ahora expresidente Carlos Dívar, obligado a dimitir por no justificar viajes por importe de 28.000 euros desde el año 2008.
Una cifra en la que no están incluidos los gastos de los altos cargos en desplazamientos imputables a relaciones internacionales, lo que supondría sumar otros 360.000 euros, ni el coste de los escoltas con los que viajan, 295.000 euros.
El presidente de la Comisión Presupuestaria del CGPJ, Ramón Camp, fue el responsable de explicar el viernes en un encuentro con medios algunos datos sobre el presupuesto de este órgano. El vocal admitió que el no haber proporcionado información sobre el presupuesto de la institución, que este año asciende a 71 millones de euros, ha engordado el escándalo en torno a Dívar, de quien su sustituto, Fernando de la Rosa, aseguró que se le había causado un "daño irreparable".
Camp, por su parte, insistió en que el órgano judicial utiliza sus recursos de manera transparente, pero que lo será más a partir de ahora. En el pleno del jueves próximas figura, entre otras medidas, el publicar en la web de la institución los principales datos presupuestarios.
Otras de las medidas avanzadas por Ramón Camp serán la regulación de los desplazamientos de los vocales a sus domicilios cuando éstos no estén en Madrid (como en el caso de 13 de los 20 actuales), y el alojamiento y manutención de los escoltas.
Camp negó que los vocales dispongan de tarjeta de crédito y que puedan realizar gastos privados en viajes oficiales a cargo del erario público, y facilitó cifras globales de desplazamientos en el año 2011. En ese año, el que el CGPJ gastó 3,4 millones de euros en viajes, 1,8 de ellos en desplazamientos de jueces y magistrados a actividades de formación en Madrid.
En total, el presidente y los vocales gastaron en viajes 400.966 euros, a lo que hay que sumar 69.679 en atenciones protocolarias. Un total de 470.646 euros que arroja una media de 22.411 por cada uno de ellos.
Aunque en la cifra no van incluidos los datos del secretario general, que apenas realiza desplazamientos, ni tampoco los viajes imputados a relaciones internacionales ni los gastos de escoltas, se desconoce la cifra de dinero públco gastado en viajes de cada uno de los vocales.