Dívar: "Si la solución es irme no pondré obstáculos"

Este lunes, Carlos Dívar concede una entrevista a El Mundo, días antes de su más que previsible dimisión. El aún presidente del Consejo General del Poder Judicial responde a las preguntas de María Peral, aunque juega al despiste sobre lo que anunciará el próximo jueves: "No he anunciado que me voy a marchar el jueves. Lo que he dicho es que ese día haré una manifestación contundente y clara sobre la dimisión que me han pedido". Dívar asegura que "si el jueves decido renunciar -tengo toda la semana para pensarlo- la cuestión que ha cambiado sería que, si verdaderamente los vocales no me apoyan o de alguna forma me retiraran su confianza, es evidente que no puedo o no debo contra la voluntad mayoritaria, ampliamente mayoritaria, de los vocales continuar como presidente". Aún así, insiste en que la respuesta de dentro de tres días "no tengo claro cuál va a ser".

Carlos Dívar insiste, durante toda la entrevista, en que ha habido una campaña orquestada en su contra: "Tras el cambio de Gobierno ha habido en el Consejo una alteración de poderes que ha llevado a algunos a esa campaña. Una campaña que, a mi parecer, sobrepasa todos los límites de la lógica, de la proporción".

Sobre los viajes en sí, Dívar se mantiene firme en su postura, y reitera que no ha comentido ninguna irregularidad, porque cargaba los gastos de todo el fin de semana –aunque no tuviera actos- ya que "tenía que hacer visitas, me ponía en contacto con personas, con autoridades. Muchas veces sí que he tenido actos en sábados y domingos. Son 32 viajes en un período de casi cuatro años. Estamos haciendo un mundo", alerta.

Además, señala que en esos desplazamientos "en que me he quedado algún día privadamente, los gastos están en mi haber personal y con mis facturas. No tengo la menor conciencia de haber cometido ninguna infracción ni haberme salido nada de las normas que tiene establecidas el Consejo".

El presidente del Consejo General del Poder Judicial dice que no le parecen "excesivos" sus gastos cargados al erario, ya que, en relación a los lujosos hoteles en los que se alojaba, "hay que tener en cuenta los precios que me hacían. Al ser un cliente habitual obtenía precios menores". Dívar afirma que jamás se ha planteado devolver el importe de estos viajes. "Si se demostrase alguna irregularidad no tendría ningún inconveniente en devolverlo", pero es que no la veo". Para Dívar, su único error es "no haber hablado antes".

Preguntado por los jueces de a pie, que trabajan en condiciones precarias y se han visto afectados por la polémica de los viajes, Dívar afirma: "Mi corazón sangra precisamente por los jueces sencillos que trabajan en esas condiciones, como he trabajado yo muchos años. Ellos no tienen culpa de esta situación -que yo no inicié-, son los que verdaderamente me preocupan".