Soraya se burla del "ojo clínico" de Rubalcaba y de los "estrategas del PSOE"

La vicepresidenta del Gobierno solo necesitó rememorar una declaración de Alfredo Pérez Rubalcaba para desarticular la ofensiva del PSOE a propósito de la línea de crédito a los bancos españoles, que el PSOE ya utiliza abiertamente como arma política. Tras escuchar la retahíla de quejas de Soraya Rodríguez sobre "el rescate" aprobado el pasado sábado, la veterana parlamentaria hizo memoria a propósito de los "estrategas" socialistas.

Lo primero que hizo fue saltar de escaño y centrarse en Rubalcaba, con todo lo que esto tiene de simbólico, una vez ridiculiza a Rodríguez. Soraya Sáenz de Santamaría empezó con su recital: "Cuando en 2008 y en 2009 en la Unión Europea se recapitalizaban los bancos, los estrategas del PSOE decían que el sistema financiero era muy sólido y se decía que no costaba nada". Algo, expuso, se demostró falso una vez el informe del Fondo Monetario Internacional incidió en que "se subestimaron los problemas".

La portavoz del Ejecutivo se centró, a renglón seguido, en el actual líder del PSOE, antes vicepresidente del gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero: "Hace menos de un año dijo que teníamos una banca bien supervisada. ¡Qué ojo clínico señor Rubalcaba, qué ojo clínico!", se contestó, provocando la ovación y carcajada de la bancada popular. Sáenz de Santamaría, en línea con Mariano Rajoy, aseguró que la ayuda de la banca es una buena noticia, una vez servirá para recuperar la confianza perdida. 

La ofensiva, propiamente dicha de los socialistas, fue liderada por la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, quien dejó caer que el presidente Mariano Rajoy prefiere el fútbol al Parlamento: "Dedicó más tiempo a ir al futbol a Polonia que a comparecer en el Parlamento desde que es presidente", dijo, muy aplaudida por su bancada socialista.

"Usted tuvo tiempo de contar las horas que el presidente del Gobierno dedicó a ir a Polonia. Seis y medio de vuelo, dos horas y medio de fútbol y regreso. Quince horas y media. Yo le he hecho el trabajo. Le he contado el tiempo que desde que el presidente del Gobierno fue investido presidente ha dedicado a venir a esta Cámara. Se lo digo exactamente: doce horas y diez minutos", afirmó Rodríguez, antes de recibir el golpe de la vicepresidenta.