La ministra de Sanidad, Ana Mato, ha dicho este miércoles en el Congreso de los Diputados que la reforma sanitaria "no excluye a ningún colectivo" y que acaba con el "descontrol" con el que se "perdían más de 1.000 millones de euros".
Respondiendo a la pregunta de la diputada socialista Susana Sumelzo, que la ha acusado de realizar el "mayor recorte de derechos de la sanidad en toda la democracia", Mato ha dicho que una cosa es hacer demagogia y que otra muy diferente es "que la demagogia se convierta en realidad". La ministra ha añadido que "la sanidad no se mantiene sin pagarla" y que, con la nueva reforma, "nadie va a quedar desatendido".
La ministra también ha respondido a la diputada socialista Carmen Montón, que preguntó "cómo afectarán los recortes en sanidad a las mujeres", aunque enfocó su crítica en el aborto.
Mato le ha dicho que "el Gobierno no ha planteado ningún recorte en la cartera de servicios", y que todos los españoles tendrán las mismas prestaciones sanitarias "con independencia de que sean hombres y mujeres".
Sobre el aborto, Mato ha dicho que la sanidad pública seguirá dando cobertura a los casos que estén amparados por la ley. Concluyendo la ministra ha dicho que los avances de la mujer "no se demuestran por el cambio en la cartera de servicios, sino por las oportunidades que les den".