Ni los durísimos ajustes que ha tenido que acometer como presidenta de Castilla-La Mancha fruto -en gran parte- de la herencia recibida, ni el hecho de que también sea secretaria general del PP a nivel nacional con todo lo que eso conlleva... el respaldo de los suyos es incontestable. Así quedó de manifiesto en el congreso del partido a nivel regional, en el que María Dolores de Cospedal fue reelegida presidenta con un aplastante 98,8 por ciento de los votos.
El cónclave se convirtió, desde un inicio, en un paseo para la dirigente autonómica con más poder en el PP de Mariano Rajoy. Los populares castellano-manchegos se mostraron como una piña con su líder. Obtuvo 723 votos a favor y ninguno en contra, con ocho votos en blanco y seis nulos. "Todos estamos con ella, creemos en su proyecto y eso es lo más importante", resumía un alto cargo, en conversación informal.
No hubo más candidaturas que la suya porque, en voz del citado dirigente, "nadie ha conseguido nunca tanto para el PP aquí que ella". Este fin de semana se recordó como, hasta mayo del año pasado, éste se consideraba "un feudo socialista infranqueable". "Hoy es el primer día de una época en la que el PP parte como un partido de gobierno al servicio de todos los ciudadanos", proclamó Cospedal, que reclamó a los suyos "aliento, fortaleza, ilusión, confianza y ganas de luchar".
Qué duda cabe que no está siendo una legislatura tranquila, y que aún vendrán momentos complicados. En campaña electoral, la hoy presidenta advirtió que no habría buenas noticias hasta pasados, al menos, dos años. Tampoco será fácil su labor en Génova, donde busca coordinar de una vez por todas los mensajes y ayudar al Ejecutivo central a explicar sus reformas. El PP de C-LM saca los dientes cada vez que desde el PSOE dicen que descuida sus obligaciones para hacerse cargo de la Secretaría General y se muestra orgulloso de la dualidad de cargos.
La confianza que en ella tiene el presidente del Gobierno es incuestionable. También su peso interno, cada vez mayor. "El PSOE quiere que España se hunda para sacar tajada", denunció este mismo sábado, en calidad de número dos del PP, rematando: "Que no nos bajen la cabeza quienes ahora tiran piedras.