Griñán desafía a Rajoy en la investidura con ataques a sus medidas de ajuste
En su discurso de investidura, Griñán atacó las políticas de Rajoy y descartó el déficit cero. Hubo alusión a los ERE, pero para sacar pecho.
El candidato a la Presidencia de la Junta y presidente en funciones, José Antonio Griñán, ha abierto pasadas las 12.00 horas la sesión de investidura en el Parlamento andaluz, en la que será reelegido con el apoyo de IULV-CA, destacando que la izquierda sigue siendo "la opción mayoritaria" en Andalucía.
Griñán ha subrayado al comienzo de su intervención que la fuerza política más votada "no ha sido el PSOE", sino que las urnas han situado al PP como el partido "con más votos y más escaños, aunque sin otorgarle el número suficiente de ellos para poder formar gobierno en solitario". "Más de la mitad de los votos emitidos fueron para la izquierda representada en esta Cámara por PSOE e IU", ha añadido. Griñán dijo que "la democracia es tan válida cuando refrenda nuestros pensamientos como cuando no lo hace". No se refería a su propio partido. Además, exigió "respeto para la libre decisión de los andaluces, una tierra libre y honesta como las demás" que ha elegido votar "distinto que el resto de España".
El candidato socialista a la Presidencia de la Junta ha asegurado que va a formar con IU un gobierno de coalición que busque el acuerdo de toda la sociedad, comprometido con Andalucía y "sin aventuras, pero sin claudicaciones". Griñán ha solicitado la confianza de la Cámara con un proyecto "compartido" después del camino señalado por las urnas en el pasado 25 de marzo.
Griñán ha asegurado que cree en el principio de estabilidad, pero no comparte el de déficit cero, que ha considerado "más un prejuicio ideológico que una norma de buen comportamiento para todo tiempo y lugar", y ha defendido la necesidad de abordar una "senda de reducción de los desequilibrios financieros de las distintas administraciones públicas", aunque ha advertido de que "la forma en que estamos afrontando este problema es un error".
Entre estos errores, el candidato socialista ha citado "subordinar el empleo al objetivo de déficit, fijar plazos excesivamente cortos para la subordinación fiscal o la distribución del déficit entre todas las administraciones sin atender las competencias de cada una de ellas", así como "olvidar que el principal problema del endeudamiento no está en el sector público, sino en el privado, en las familias, las empresas y la banca".
"Equilibrar las cuentas públicas es un buen objetivo si con ello no deprimimos la economía y aumentamos el desempleo, por eso patrocinamos estabilidad en el ciclo que es la que ha venido practicando Andalucía en los últimos años", ha resaltado Griñán, que ha lamentado haber oído declaraciones "falsas y temerarias" en los últimos meses sobre el estado de las finanzas andaluzas ante las que la Junta ha sido "responsable y prudente a la hora de contestar" para no iniciar una "espiral de confrontación que habría puesto en riesgo, aún más, la estabilidad financiera de nuestro país en momentos muy delicados".
En su intervención ha ido trazando algunas de las 28 leyes y 250 medidas que contiene el acuerdo programático alcanzado con IU para un gobierno de coalición y, entre ellas, ha avanzado la puesta en marcha urgente de un plan de choque contra el desempleo, que se multiplicó con él en el poder, y la creación de una especie de banco público: el Instituto Público de Crédito Andaluz.
Ha adelantado que no permitirá retrocesos en los derechos de los ciudadanos y que no habrá privatizaciones, pese a la merma de ingresos de casi 2.700 millones que sufrirá el presupuesto andaluz de 2012 por la reducción de los ingresos del Estado.
Aun así, ha admitido que tendrá que reformular el presupuesto andaluz de 2012 con "decisiones difíciles e impacto social", ha recordado Griñán, sin concretar su alcance. A continuación ha reiterado que en Andalucía "ninguna decisión presupuestaria va a traducirse en privatizaciones".
La inevitable alusión a los ERE
"Soy plenamente consciente del impacto en la opinión pública que ha tenido el conocido como fraude de los ERE", ha señalado Griñán antes de jactarse de "la rápida reacción" que tuvieron en su "investigación y denuncia".
Por ello, ha repetido que "ética y solvencia" son dos valores del futuro gobierno andaluz, que será "realista", "no va a engañar a nadie ni a prometer lo imposible, pero que hará lo imposible para cumplir sus promesas", ha apostillado el futuro presidente andaluz.
"Atajar el descrédito de la actividad pública se convierte también en un objetivo imprescindible" de su futuro gobierno, ha señalado Griñán.
Para ello, ha señalado que en esta legislatura se darán pasos para la evaluación participativa, una carta de compromiso ético, para el refuerzo del control y la supervisión de la gestión pública y para lograr más transparencia, el acceso a la información y para un "gobierno abierto".
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