La líder nacional de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, ha augurado que Amaiur se convertirá en la primera fuerza política del Parlamento vasco tras las próximas elecciones autonómicas como consecuencia tanto de los "piropeos" que le dedica el PSOE como de la negativa del PP a ilegalizar la formación.
En una entrevista concedida a Europa Press, Rosa Díez ha reconocido que "parece lógico" que Amaiur sea la fuerza política que más escaños ocupe en el próximo Parlamento vasco. "No sólo porque ellos se encuentran fuertes, sino porque el PP los considera unos demócratas equiparables a cualquier partido político democrático y sobre todo porque el PSOE tiene una ansiedad por convertirles en el eje", ha argumentado.
La diputada de la formación magenta ha avisado de que "les están poniendo en valor" ante el conjunto de los ciudadanos y "haciéndoles la campaña", lo que puede incluso llevar a votar a los proetarras a gente que no lo habían hecho en anteriores convocatorias electorales. "Parece que la solución de todos los problemas se va a derivar de que ellos ganen las elecciones", ha lamentado.
Pero, además, ha insistido en censurar la negativa del Gobierno a instar a la ilegalización de Amaiur y ha ironizado sobre la idea de que "lo que era importante en la oposición" ya no lo es tanto cuando se llega al Ejecutivo. Como ejemplo ha puesto las declaraciones del aún diputado de Amaiur Iñaki Antigüedad en contra de la desaparición de ETA.
"Es un drama lo que está pasando –ha lamentado Díez–. Que los que no se privan de declararse herederos o cómplices políticos de la organización terrorista que nos ha amargado la vida, además de quitársela a más de 800 personas, están ahora mandando en la política vasca y siendo jaleados por mucha otra gente de quien los malos se consideran sus enemigos".
Rosa Díez ha analizado también el papel del histórico portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, y ha exigido que el Tribunal Supremo, que tiene que decidir sobre su condena por intentar reconstruir la formación ilegalizada, cumpla la ley "sin atajos y con coherencia con otras actuaciones anteriores".
En este contexto, la líder de UPyD no ha querido "sufrir por anticipado" por el futuro nacionalista que le espera al País Vasco según las encuestas y ha defendido que Euskadi "necesita más democracia y no más nacionalismo".
A su juicio, no fue "sensato" que el pacto entre PSE y PP para el Gobierno vasco "no estuviera basado en un acuerdo político y unos compromisos políticos", y aunque ha reconocido las cosas "muy importantes" que pusieron en marcha durante los primeros meses, ha lamentado que el acuerdo ha terminado en "la legislatura del declive".
"Quisiera no creer que la oportunidad para el constitucionalismo se ha agotado porque los dos partidos constitucionalistas más importantes en términos numéricos no han estado a la altura", ha reconocido.
Además, ha augurado buenas perspectivas electorales para UPyD en las próximas elecciones vascas. Pese a que ha reconocido que los partidos pequeños tienen "muy complicado" hacerse un hueco en las comunidades donde hay formaciones nacionalistas, ha mostrado su esperanza de que los ciudadanos reconozcan el trabajo de su diputado, Gorka Maneiro, e incluso amplíen la representación magenta.