Iñaki Urdangarín será juzgado por los delitos de malversación, prevaricación, fraude a la Administración y falsedad documental, según publica El País este lunes. El diario asegura que, según "fuentes próximas a la investigación", el yerno del Rey se libraría del delito de evasión fiscal, porque lo defraudado no superaría los 120.000 euros, mínimo establecido por el Código Penal.
La estrategia del marido de la infanta Cristina de atribuir a su socio Diego Torres todas las anomalías en la gestión del Instituto Nóos no ha dado resultado, a juzgar por las nuevas pruebas solicitadas por el instructor.
En su último auto, el juez José Castro rebate la coartada de Urdangarín sobre su desvinculación de los negocios sospechosos a raíz de que la Casa Real se lo ordenara en la primavera del año 2006. El juez sostiene que hay múltiples pruebas documentales y testimonios que acreditan todo lo contrario.
Por tanto, la investigación acreditaría los siguientes delitos para sentar a Urdangarín en el banquillo:
- Fraude a la administración. Urdangarín y Torres cobraron con sus empresas dinero público a través de Nóos por servicios que no prestaron.
- Prevaricación. El duque de Palma, a través del Instituto Nóos, logró sin concurso previo diversos encargos de las Administraciones públicas por casi seis millones de euros en dos años.
- Falsedad documental. Cuando el juez Castro investigó el caso, solicitó las facturas que justifican los gastos realizados en la organización de los eventos en el Instituto Nóos. El magistrado se encontró con que algunas no correspondían al servicio realizado, mientras otras tenían fechas anteriores a la firma del contrato. Además, la investigación detectó la falsificación de firmas en la presentación de ofertas a un concurso para la promoción del equipo ciclista patrocinado por el Gobierno balear.
- Malversación de caudales públicos. Urdangarín y Torres recibieron más de seis millones de euros de dinero público para organizar distintos eventos a través del instituto -sin ánimo de lucro-. El precio de los eventos. Según la investigación, no alcanzó ni la mitad de esos seis millones de euros recibidos.