El coordinador del Área Económica del PP andaluz, Rafael Carmona, denunció el miércoles que, del volumen total que manejó la empresa pública Invercaria -cifrado en 65 millones de euros-, "en torno a 50 millones quedaron fuera de cualquier norma que calculase el procedimiento sobre cómo invertir el dinero público".
El dirigente popular ha asegurado que estas cifras, que provenían de las arcas de la Agencia IDEA, "se han manejado libremente".
El PP ya avanzó la semana pasada que la empresa pública Inversión y Gestión de Capital Riesgo de Andalucía SAU (Invercaria) se gestionó como un segundo fondo de reptiles y con idéntico procedimiento al utilizado en el escándalo de los expedientes de regulación de empleo (ERE), que actualmente investiga la Justicia.
Repartir sin control
En rueda de prensa, Rafael Carmona ha destacado que, entre los años 2005 y 2010, "Invercaria ha estado opaca al control de la Administración Pública", porque "no ha estado sujeta ni a control público ni financiero". Ante la incógnita sobre los destinatarios de estos fondos, el popular ha incidido en que "han ido a los amigos del PSOE" porque "se han dedicado a repartir fondos sin control a los cercanos al PSOE".
El dinero invertido en un lustro a través de Invercaria fue creciendo de forma exponencial año a año y a medida que se recrudecía la crisis: 1,73 millones en 2005; 11 millones en 2006; 9,2 en 2007; 18,8 en 2008; 19,5 en 2009, y 5,3 en 2010, según el desglose facilitado por el PP extraído de las cuentas.
El dirigente popular ha avanzado que estos 50 millones de euros se invertían "en préstamos participativos que nunca se recuperaron", y en los programas "Atalantis, Melkart, Caya y Campus", de los cuáles únicamente el procedimiento de este último "se ajustaba a la Ley de Incentivos".
La punta de otro iceberg
Asimismo, Carmona ha recordado las palabras de la consejera de Presidencia, Mar Moreno, quien dijo sentirse orgullosa de la actividad de Invercaria, empresa de la que el dirigente popular ha aventurado que "se hablará mucho en el futuro".
Para el coordinador del PP, "el procedimiento que se ha seguido es igual al de los ERE: buscar un instrumento público, dotarlo de fondos y otorgarlos discrecionalmente". Por ello, ha recordado a Moreno la necesidad de "leer el informe de la Cámara de Cuentas", el cual "adelanta que no se estaba cumpliendo con lo que se marcaba e incide en que "faltaba publicidad en el procedimiento y existía discrecionalidad a la hora de otorgarlos".
Por otra parte, en referencia al escándalo de los ERE fraudulentos, Rafael Carmona ha señalado que "ahora la Junta solicita a las personas que pidieron las ayudas que digan por qué las pidieron", cuando "lo normal sería solicitarlo antes de conceder cualquier ayuda".
La Junta trata de ponerse en la cabeza de la manifestación
El gabinete Griñán no ha acertado con la estrategia de negarlo todo y ahora, en una pirueta de última hora, ha anunciado que va a investigar los casi 70 millones en resoluciones de ayudas distribuidas entre empresas, planteándose incluso pedir su nulidad. No obstante, según el PP, "se hablará" del papel preponderante que, a su juicio, jugó el exvicepresidente y mano derecha de Manuel Chaves en sus sucesivos gobiernos, Gaspar Zarrías, en el fraude de los ERE e Invercaria.
Invercaria quiere ir a los tribunales
Invercaria amenazó el miércoles con denunciar al PP ante los tribunales por sus informaciones "tendenciosas, sesgadas y falsas". No dice una palabra sobre el informe fiscalizador de la Cámara de Cuentas, origen de las denuncias.
Con las declaraciones del PP, dice Invercaria, "se daña la imagen de la compañía, y afectan negativamente la proyección y expectativas de negocios de las empresas privadas con las que Invercaria tiene articuladas operaciones de capital riesgo". En una nota, apunta que "no se puede jugar con el empleo y el sustento de muchas empresas y trabajadores andaluces con fines partidistas". Para la empresa, "se constata un total desconocimiento o manipulación sobre el carácter de las operaciones" que consiste en préstamos, préstamos participativos o participaciones en capital en empresas.