Pocos en el Partido Popular creían posible que María Dolores de Cospedal fuera a perder su cuota de poder interno. Pero, si algún dirigente albergaba dudas, este domingo quedaron resueltas. "Me encuentro bien" compaginando la presidencia de Castilla-La Mancha y la Secretaría General, contestó en una entrevista en Onda Cero.
El organigrama del PP se revisará en el congreso nacional del partido, que se celebrará del 17 al 19 de febrero en Sevilla. Y no es un puzzle fácil a pesar de que los vientos soplen, y de que forma, a favor. En él se mide el peso de las diferentes familias populares y, además, se tienen que colocar a aquellos que se quedaron sin hueco en las administraciones del Estado.
Una pieza clave es la de Esteban González Pons, que estaría llamado a convertirse en una especie de coordinador general -al estilo del creado por Francisco Álvarez Cascos- que apoyara a Cospedal, que continuaría como número dos y sentándose a la derecha de Mariano Rajoy en los órganos internos.
"Seguiré como secretaria general si Rajoy me proponen y así lo votan los afiliados del PP", destacó la protagonista, si bien introdujo un comodín novedoso en su ya clásica respuesta: "Me encuentro bien en esta situación". Y, por si no fuera poco, sacó pecho de que la formación haya cumplido "con todos los retos y de forma satisfactoria" desde que ella tomara los mandos en el convulso cónclave de Valencia, y no es que fuera fácil.
La confianza total que en ella tiene el presidente del Gobierno es el principal motivo de la operación, que de puertas para adentro se da por descontada a la espera de hacerla oficial. Este mismo domingo, un alto cargo exponía que Rajoy "sin duda" se decantará por ella y "nadie le toserá", a pesar de que en el denominado aparato prefieran a alguien de su círculo.
Así las cosas, Cospedal seguiría compaginando sus dos cargos, lo cual crea un precedente que podría ser utilizado por otros colegas del Comité de Dirección. Es el caso de Ana Mato, actual ministra y vicesecretaria de Organización, o Javier Arenas, que está llamado a ser presidente de la Junta de Andalucía y ocupa la vicesecretaría de Política Autonómica y Local.
"Hay nervios. Es un periodo de muchos cambios, también en Génova", admitía, en plenas fiestas navideñas, un destacado del partido. Todo se resolverá en la capital hispalense, donde tendría que "resonar", en voz de más un dirigente, el nombre de "Esteban". El plan de Rajoy pasaría porque se convirtiera en el portavoz autorizado del partido.