Tras los movimientos de Carme Chacón y la guerra de manifiestos, ahora es Rubalcaba quien mueve ficha. Según adelantan fuentes del PSOE a Libertad Digital, el dirigente socialista se ha desplazado a Sevilla junto a Elena Valenciano para reunirse en secreto con José Antonio Griñán, presidente de la Junta andaluza y secretario general del PSOE andaluz. Figura clave en este proceso de transición que este martes ha estado presente en las palabras de la rival de Rubalcaba, Carmen Chacón: "Hay mucha gente que tiene ganas de empujar, de levantar este partido y de estar en buena forma para levantar el país y para ganar Andalucía".
Sus palabras llegaban después de Griñán se hubiera quejado de que ninguno de los dos posibles aspirantes hablara de Andalucía, que celebra elecciones en marzo. Desde Sevilla, el líder andaluz esbozaba una sonrisa al ser informado por los periodistas de estas declaraciones.
Pero a un gesto le ha seguido otro de mayor simbolismo y contundencia. Cuando apenas había concluido la apertura solemne de la X legislatura en las Cortes Generales, Rubalcaba se dirigía a la estación de Atocha donde se subía al AVE de las 14:30 rumbo a Sevilla para reunirse con Griñán en secreto en una sede "no oficial: ni en la presidencia de la Junta ni en la sede del PSOE andaluz". El objetivo, ganarse su apoyo y el de todo el PSOE andaluz, que se encuentra dividido entre los que secundan a Manuel Chaves, próximo a Rubalcaba, y a Griñán, figura ambigüa pero que ha hecho guiños en favor de la socialista catalana.
Candidatura: el jueves
Tras la cita ha quedado cerrada la fecha más conveniente en la que Pérez Rubalcaba formalice su candidatura, prevista para esta misma semana. Una fecha que "se ha ido retrasando" por la guerra de comunicados que ha paralizado e incendiado al partido en los últimos días. El derrotado candidato a La Moncloa "tenía previsto anunciarlo el lunes" pero decidió postergarlo debido a la convulsión interna de los comunicados.
Finalmente será el jueves cuando se formalice el anuncio una sala de la sede de UGT en Madrid, pues el anuncio "no debería formalizarse en Ferraz" por parte de ninguno de los aspirantes a la secretaría general del PSOE.
Lo que ya muchos crítican en público y en voz alta es que ya no es momento de "papelitos" y comunicados sino de dar un paso hacia adelante y dejar de hablar por detrás.