Colabora

El contable de Urdangarín confiesa el fraude fiscal en Nóos

El duque de Palma también trató de defraudar a la Hacienda de Belice.

El duque de Palma, Iñaki Urdangarín

El hombre de las cuentas en Nóos, el Instituto presidido por Iñaki Urdangarín, era Marcos Tejeiro. A su vez cuñado de Diego Torres, el socio en los negocios del marido de la Infanta Cristina. Su testimonio ante la Policía Judicial, del que hoy dan cuenta Eduardo Inda y Esteban Urreizieta en El Mundo, podría ser una de las principales pruebas para imputar al Duque de Palma, al menos por el delito de evasión de impuestos. "Sí, puede ser" es lo que acertó a contestar cuando los agentes sugirieron que en Nóos era una práctica habitual cruzar facturas para generar gastos falsos.

En las pesquisas de la Policía Judicial aparece además un hermano de Marcos Tejeiro, Miguel, quien gestionaba un Bufete encargado de articular un sistema para tributar al mínimo posible al fisco. Un rudimentario procedimiento que quedó plasmado en un croquis que ha intervenido la Policía que situaba al Instituto Nóos en el vértice central de la trama.

La sociedad presidida por Urdangarín, sin ánimo de lucro, recibía dinero de las administraciones que le contrataban para diversos eventos, mientras a su vez otras sociedades instrumentales del marido de la Infanta Cristina y su socio vaciaban las arcas de Nóos presentando cuantiosas facturas en concepto de "diseño" de todos esos proyectos. También aparecía en ese trasiego de facturas otra sociedad, Intuit Strategy Innovat. A través de esta última compañía, Urdangarín cobró parte de los más de 700.000 euros que le facturó a la SGAE, tal y como adelantó Libertad Digital.

El objetivo de esta triangulación de facturas pasaba porque el beneficio declarado a Hacienda no superase nunca los 275.000 euros. Pero como los ingresos no paraban de aumentar, fueron trasladados a paraísos fiscales de Reino Unido y Belice.       

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario