Zapatero emplaza al siguiente Gobierno a continuar el proceso

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha comparecido una hora después de que ETA hiciera público su comunicado en el que anuncia "el cese definitivo de su actividad armada" en el Palacio de La Moncloa.

Con actitud solemne ha destacado la "importancia trascendental" de este anuncio que no hace sino "reafirmar más que nunca mi confianza en la democracia, en la libertad y en España".

"Durante demasiados años hemos sufrido y combatido el terror", ha señalado Zapatero reivindicando la labor de "cada uno de los sucesivos gobiernos". "Es de justicia recordar el trabajo de los distintos ministros del Interior y en particular de quienes me han acompañado", ha dicho sin resaltar ningún nombre en concreto.

No ha querido olvidarse el presidente de "la acción tenaz y eficaz de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de la Policía y de la Guardia Civil, cuyo sacrificio y generosa entrega al servicio de los ciudadanos les ha costado tantas veces su propia vida. La acción de la Justicia, de los servicios de inteligencia y de muchos otros servidores públicos ha contribuido a su éxito", ha destacado Rodríguez Zapatero.

También ha tenido palabras para el país vecino, Francia, y sus autoridades "con quienes hemos contraído una perpetua deuda de gratitud y solidaridad. La amistad con España del presidente Sarkozy ha sido determinante, y desde aquí transmito todo mi reconocimiento. Un reconocimiento que se extiende a los países que, durante, nos han brindado su apoyo y solidaridad".

"Y ha sido posible, sobre todo, gracias al temple y a la firmeza de la sociedad española, guiada por la referencia segura del Estado de derecho, que hoy, definitivamente y sin condiciones, triunfa como único modelo posible de convivencia", ha proseguido.

Y por fin su referencia a las víctimas. "La nuestra será una democracia sin terrorismo, pero no una democracia sin memoria. La memoria de las víctimas, de cada una de las 829 víctimas mortales y sus familias, de tantos heridos que padecieron el injusto y aborrecible golpe del terror, nos acompañará siempre. Acompañará a las futuras generaciones de españoles". Ha querido tener unas palabras para la "sociedad vasca". "Tengo la convicción de que, a partir de ahora, disfrutarán, al fin, de una convivencia no anudada al miedo o a la intimidación; de una convivencia plenamente libre, de una convivencia en paz".

El próximo Gobierno tiene una gran "responsabilidad"

Ha sido ya al final de su declaración cuando ha querido trasladar al próximo Gobierno que salga de las urnas el 20-N la responsabilidad de continuar con el proceso. "Al Gobierno y al Parlamento que resulten de las próximas elecciones generales les corresponderá conducir esta nueva etapa, que también deberá responder a un compromiso unitario".

"Con la contención a que nos obliga la historia, vivamos, hoy, la legítima satisfacción por la victoria de la democracia, de la ley, de la razón. Una satisfacción teñida por el recuerdo inolvidable del dolor causado por una violencia que nunca debió pronunciarse y que no ha de volver jamás", ha concluido Zapatero su intervención en la que no se han permitido preguntas.

La comparecencia del candidato

En una comparecencia desde Ferraz, el candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha celebrado, como el presidente, el comunicado: "Pone fin a décadas de acciones terroristas que han generado muerte y sufrimiento". En su opinión, sin embargo, el protagonista no es ETA, sino "el Estado de derecho, porque ha ganado, han ganado la democracia y las instituciones".

Tras "felicitar a la sociedad vasca y a todos los demócratas", Rubalcaba ha destacado que "la democracia ha sabido llegar hasta aquí y sabrá conducir la etapa que hoy se abra", en alusión, como el presidente, al próximo Gobierno que salga de las urnas.

También ha pedido "la unidad de todos los demócratas, que debe ser la clave de los tiempos que vienen". "Seguiremos trabajando sin descanso por dicha unidad", ha dicho".

La última parte del discurso ha sido para las víctimas, "depositarios de estos años y garantes de que nadie vaya a reescribir la historia". "Me acuerdo, sobre todo, de quienes fueron asesinados por ETA en el tiempo en que fui ministro del Interior, de ellos y de sus familias. Ojalá este día hubiera llegado antes", ha dicho.