Manuel Cobo seguirá siendo mano derecha de Alberto Ruiz Gallardón en sus nuevas responsabilidades políticas. En círculos cercanos siempre se dio por hecho: "Si Alberto se va, también Manolo". De ahí que, una vez la incursión del aún alcalde de Madrid en las listas electorales se da por hecha a falta de la confirmación oficial -que llegará hoy-, lo que preocupaba en las últimas horas en el Palacio de Correos -sede del consistorio- era dejar bien posicionado su eterno número dos.
Aunque Cobo no necesita un escaño para recalar en un puesto relevante una vez el diputado Gallardón se convirtiera en ministro o vicepresidente, fuentes del PP de Castilla y León confirmaron a este diario que la intención era situarle en los primeros puestos de una candidatura; se baraja, entre otras, la de Segovia.
Cobo siempre ha dejado claro que "nada" le ataba al Ayuntamiento madrileño si Gallardón se iba. "Su última salida, volver a la actividad privada", explican. De hecho, la imagen de una Ana Botella alcaldesa con él como vicealcalde es "impensable, disparatada", según comparten varias fuentes.
Gallardón le "debe mucho a Manolo", dicen en el PP de Madrid, donde recuerdan que siempre "ha puesto la cara" por el regidor. El ejemplo más claro, la entrevista en el
diario El País en la que Cobo insultó a la presidenta Esperanza Aguirre por el caso de Caja Madrid llegando a perder, incluso, el carnet de militante por sus palabras.
Por el contrario, con Botella la relación no es tan íntima. De hecho, "en el dramático momento de la entrevista, ella se puso en varias ocasiones del lado de Esperanza", destacan desde las filas populares.
El PP retrasa sus listas al viernes
La posibilidad de que Cobo sea finalmente diputado se debatiría finalmente el viernes, y no hoy, en la reunión del Comité Electoral Nacional que preside Miguel Arias Cañete. La expectación por las listas es máxima, más aún después de que durante toda la semana se haya estado calentando el ambiente.
El órgano electoral de Madrid, que preside Ignacio González, aprobará la candidatura con el nombre de Ruiz Gallardón, y ésta recibirá el beneplácito de la nacional salvo cambio imprevisto de última hora.