José Antonio Griñán ha recibido otro varapalo, esta vez, de su propio partido y de la dirección federal que ostenta Alfredo Pérez Rubalcaba, que le da la razón a Manuel Chaves. En Andalucía, el Parlamento, por iniciativa del PSOE, ha decidido que sea incompatible que un alcalde puede ser diputado, tanto nacional como autonómico. Trataba con ello de eliminar de la escena electoral al grupo de alcaldes del PP de las ciudades más importantes que cosecharon mayorías muy amplias en las últimas elecciones municipales. Pero ahora, Manuel Chaves ha estropeado los planes de Griñán a causa de un alcalde socialista de Benalup de Sidonia, Francisco González Cabañas, "Billy el Niño", que ha desafiado a Griñán y sin dejar de ser alcalde, va de número 3 en la candidatura gaditana del PSOE al Congreso que encabeza el propio Chaves. Ell aparato socialista ha decidido que ser alcalde y ser diputado no es incompatible en la campaña electoral y cuando se sepan los resultados, entonces el interesado deberá optar por un cargo o por otro.
Por tanto, el PP encuentra una vía para que sus alcaldes puedan estar en las listas electorales y hacer campaña. Sólo deberán renunciar a sus escaños cuando sean elegidos y dejar correr la lista al siguiente para seguir siendo alcaldes.
Lo que propuso el PSOE y aceptó el Parlamento es lo siguiente: "En este sentido considera adecuado modificar la Ley 1/1986, de 2 de enero, Electoral de Andalucía, exigiendo la plena dedicación de los parlamentarios andaluces e incluyendo a los alcaldes de los municipios y a los presidentes de las diputaciones provinciales entre los cargos incompatibles con el ejercicio del cargo parlamentario." Se deduce, pues, que la incompatibilidad, y con mayor motivo, deberá extenderse a los parlamentarios nacionales, a los que la plena dedicación le sería aún más difícil.
El presidente Griñán consideró con lógica aplastante que ningún alcalde socialista debería ir en las listas al Congreso ni al Parlamento andaluz. Pero Rubalcaba decidió ayer obligar a Griñán a desbloquear las candidaturas socialistas por Cádiz al Congreso de los Diputados y al Senado de cara a las elecciones generales del próximo 20 de noviembre y permitir que el secretario general de este partido en la provincia gaditana, Francisco González Cabaña, alcalde además de Benalup de Sidonia, vaya de número 3 en la lista que encabeza Manuel Chaves. Ferraz ha considerado que la renuncia a la alcaldía no es obligatoria antes de la celebración de las elecciones.
Tras conocer la postura de Rubalcaba y su equipo, la dirección regional del PSOE de Andalucía que recae en Griñán y el suyo, comunicaba que había decidido dar el visto bueno a las listas de Cádiz "una vez conocido el compromiso público del alcalde de Benalup, Francisco González Cabaña, de renunciar a la Alcaldía por figurar en el puesto número tres de la lista gaditana a la Cámara Baja". Claro, el alcalde Cabañas condicionó dicha renuncia a salir elegido, por si acaso.
González Cabaña, al contrario, dijo el jueves pasado que dejará la Alcaldía de Benalup-Casas Viejas cuando así se lo ordene la dirección federal socialista. Y no se ha movido de esta posición haciendo aún más patente la derrota política de José Antonio Griñán ante una dirección provincial de Cádiz que lo ha desafiado en diferentes ocasiones y tras la que las figuras de Manuel Chaves y Luis Pizarro, su lugarteniente en el PSOE andaluz durante más de una década, cobran cada día más relevancia ante el posible fiasco electoral del socialismo andaluz tanto en las elecciones generales de noviembre como en las andaluzas de marzo.
Chaves se impone a Griñán y el alcalde Cabañas irá en la lista al Congreso
Pese a la prohibición impulsada por el PSOE de que un alcalde pueda ser diputado.
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