Pitágoras ya lo dijo hace tiempo "la hipotenusa al cuadrado es igual a la suma de los cuadrados de los catetos". (R)²=(FG)²+(ZP)².
Rasputín es un hipócrita monstruoso, inherente a su condición de “hermano iluminado”.
En el segundo libro de Daniel Estulin (Los secretos del Club de Bilderberg, Ed. Planeta, 1ª edición, septiembre de 2006), el autor revela que en la reunión del Club en mayo de 2006 se decidió reventar el mercado inmobiliario mundial. “Muchos españoles perderán todos sus ahorros por culpa de estas políticas del Club de Bilderberg”, añadía Estulin al pie de una foto en las páginas centrales.
Si esta vital información estaba al alcance del público en otoño de 2006, ¿cómo es posible que a nuestros excelentemente pagados políticos y a sus batallones de “asesores” les cogiera la maniobra por sorpresa? Habrá que admitir que detrás de esta presunta “ignorancia” no hay más que connivencia, subordinación a la élite mundialista y traición al pueblo.
Tampoco hay que romper una lanza por Rato; recordemos que fue presidente del IMF, y con eso está todo dicho: otro agentur de la élite iluminista.
No, no es el frenopático lugar para Rasputín. Su justo lugar es la mazmorra o el cadalso.
Bla bla bla... Qué más da lo que diga este sujeto, si lo que hoy ve blanco mañana lo verá negro, y pasado mañana en colorines.