El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha avisado a Bildu y sus representantes de las "consecuencias" que puede acarrear el que, con sus mensajes y gestos, esté apoyando a los presos de ETA sin acompañar su discurso de una condena firme de la violencia de la banda terrorista.
En una entrevista con Europa Press, el ministro ha remarcado que los últimos "gestos" del diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, en la festividad de San Ignacio de Loyola y en el inicio de las fiestas de Vitoria, son "sectarios y partidistas". "No me gustan", ha afirmado.
Jáuregui ha insistido en que con sus actitudes, Garitano "representa sólo a su mundo y no a los guipuzcoanos" y "no cumple sus funciones institucionales". Después de aprovechar su presencia en la Basílica de Loyola para defender a los presos de ETA y pedir el fin de la dispersión, el diputado general invitó ayer a familiares de encarcelados de la banda a asistir desde la balconada del Ayuntamiento al comienzo de las fiestas de la capital alavesa.
Pero, además, el ministro ha recalcado que hay algo "peor" en sus comportamientos, que es "defender a los presos de ETA sin condenar a la violencia". Por eso, ha lanzado un mensaje claro a Garitano: "Si los gestos de Bildu con los presos de ETA no van acompañados del rechazo a la violencia, su mensaje y su discurso serán incompatibles con la democracia, y Bildu sabe muy bien cuáles son las consecuencias de eso".