Dice Ana Mato que el adelanto electoral anunciado el viernes "se tenía que haber producido hace meses". Tal y como dijo Rajoy en su rueda de prensa minutos después del anuncio, Mato considera que "lo reclamaban la mayoría de españoles desde hace un año". Y asegura, tajante, que "tenemos un Gobierno interino cuatro meses más. Noviembre es tarde".
La vicesecretaria de Organización, que ya ejerció de corrdinadora en las elecciones europeas y en las autonómicas y municipales –en las que el PP saldó el resultado con sendos triunfos-, dice sentir una "enorme responsabilidad" ya que la del 20-N se trata de una campaña "especialmente importante para los españoles".
Dice que la estrategia para afrontar los comicios será "la misma que hemos seguido hasta ahora: presentar el partido desde el centro y la moderación" y generar confianza a partir de ellos. Siguiendo las instrucciones del comité que dirige Rajoy, se centrarán en el paro, principal preocupación de los españoles, y se distanciarán de Rubalcaba porque él está "más preocupado en sacar a su partido de la crisis" que en "sacar España de la crisis". Promete una "campaña austera, no están los tiempos para otra cosa", sin fuegos de artificio, pero fundamentalmente clara.
"El candidato del PP es suficientemente conocido y no queremos hacer alharacas. No se trata de decir soy el mejor, el más inteligente y el más guapo, sino soy la persona adecuada para sacar a España de la crisis", explica Mato en ABC.
Mato asegura que el Rajoy que se verá en la nueva campaña evitará, como en las últimas, "entrar en el cuerpo a cuerpo" y generar conflicto. "La sociedad ha pedido un cambio que no está basado ni en la división, ni en la crispación, como hace el PSOE".
Anticipa que estarán todo el verano trabajando en el programa electoral, en el que hay "seis puntos muy claros": "Lo que sí sabemos es que la regeneración institucional tiene que venir de la mano del PP. Trabajaremos porque Bildu no esté en las instituciones". Mato recuerda el caso de Bildu, pero también el de los ERE andaluces, el Faisán, que llevan los socialistas sobre sus hombros. "Ellos son muy dados a acusar con el dedo sin ningún tipo de pruebas y sabiendo de la inocencia de las personas, pero nunca, nunca, asumen responsablidades".
"Hubo chivatazo, Rb, Alfredo o como quiera llamarse es conocido por todos. Es pasado y desde el pasado y desde el pasado no se construye el futuro. Quiere hacer una campaña presidencialista, como si estuviera reinventándose a sí mismo y por eso ha apartado las siglas del PSOE. Pero ha sido copartícipe de los mayores recortes sociales de la historia. Todo el mundo sabe que estuvo en el final del felipismo y el zapaterismo. Yo entiendo que Rubalcaba quiera reinventarse en una cosa distinta de lo que es y hacer ver que no ha sido copartícipe de los cinco millones de parados", dice en ABC.