El juez Baltasar Garzón, ahora en La Haya tras su suspensión, estuvo este viernes en Valencia para clausurar el congreso mundial de la Alianza Global para la Educación en la Justicia. Allí, fue preguntado sobre las acusaciones que ha lanzado, entre otros, el PP, de haber guardado "en un cajón" la instrucción del escándalo del caso Faisán, por el que ahora hay tres altos cargos de Interior procesados.
El juez, informa Efe, se declaró "cansado" de que en España "muchos" utilicen "políticamente aquello que debería ser y resolverse en un marco estrictamente judicial", como en su opinión están haciendo algunos dirigentes políticos en torno al caso Faisán.
"El que diga eso conoce bastante poco el caso Faisán y hace un uso político torticero de la historia", ha aseverado el magistrado. Según dijo, "el caso se investigó en toda su profundidad con todas y cada una de las medidas que se tuvieran que tomar". Garzón se puso al frente de la investigación a los cuatro meses del soplo, cuando volvió a su juzgado en la Audiencia tras una excedencia. Hasta ese momento, Fernando Grande-Marlaska instruyó el caso. Tras la suspensión del juez estrella, se hizo cargo del proceso el juez Pablo Ruz.
"Los tres imputados que ahora han sido procesados los imputé yo, todas las diligencias que se han practicado hasta que me fui, también", afirmó. Además, continuó, "hubo una inspección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que estableció que la tramitación era correcta".
"Pero desgraciadamente en este país hay muchos que, a pesar de las evidencias, utilizan políticamente aquello que debería ser y resolverse en un marco estrictamente judicial", dijo.
Concluyó diciendo que ésta es "la primera vez" que dice "algo así" y que espera que "sea la última". Agregó que está "un poquito cansado de esas manipulaciones".