El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, y mano derecha de Rubalcaba comienza a destacarse como representante de los indignados en el Gobierno. También en el PSOE, en tanto en cuanto que el candidato para las próximas elecciones generales le ha nombrado encargado de "la oferta política social".
Jáuregui ya ha pedido públicamente "canalizar" muchas de las exigencias del 15-M, y este miércoles en el Congreso y en respuesta al ‘indignado’ Llamazares ha calificado de legítimas las protestas de este movimiento, a pesar de que sus reivindicaciones se estén produciendo en acampadas o manifestaciones ilegales.
El ministro ha exhibido la tarjeta de presentación de la socialdemocracia, que ha construido, dice, "el modelo social más justo" de la historia, y ha esgrimido el trabajo que realizó el PSOE en los años ochenta, "cuando España era una chatarrería".
Dice de las propuestas de los indignados que son bienvenidas, pero "no todas son posibles". Eso sí, ha convenido con Llamazares en la necesidad de dar respuesta al 15-M y de encauzar políticamente algunas de sus reclamaciones, detrás de las cuales ve un trasfondo de justicia social, de igualdad de oportunidades y de solidaridad, que son valores que también definen a su partido.
Frente a la opinión de Llamazares de que el pacto del euro no es un rescate, sino "un chantaje al modelo social europeo", Jáuregui ha dejado claro que "fuera del euro, Europa desaparece, y fuera de Europa, España va al infierno, como Grecia".