Alberto Ruiz Gallardón advirtió a Mariano Rajoy, en el marco de Foro ABC, que no volverá a ser candidato a la Alcaldía de Madrid por cuarta vez consecutiva. "Me parece algo altamente improbable, por no decir imposible", remató el recién elegido regidor, cuyas pretensiones de saltar a la política nacional se podrían materializar en los próximos meses formando parte del hipotético Ejecutivo central del PP.
El regidor hizo un discurso, ante la plana mayor de su partido y un nutrido grupo de empresarios y demás personalidades -Rodrigo Rato, incluido-, que sonaba a despedida de lo municipal. Defendiendo el pabellón madrileño frente a otras capitales europeas. Y es que, ya en el turno de preguntas, todo fue en clave nacional, en referencia a lo que hará en el corto-medio plazo.
En este sentido, lo primero que hizo Gallardón fue defender su "lealtad" a las siglas, aunque le hayan tachado de "verso suelto" o "rebelde". Recordó, en este sentido, que siempre ha agotado sus legislaturas al frente de la Comunidad de Madrid, primero, y del consistorio, después. Incluso cuando estaba en la oposición.
Se olvida, no obstante, del chantaje al que sometió a Rajoy en los meses previos a las elecciones generales de 2008, cuando le pidió públicamente que le llevara con él en las listas electorales al Congreso. Ante el portazo del líder nacional, convocó una rueda de prensa en la que anunció que abría un periodo de reflexión que, dejó entrever, finalizaría con su marcha de la vida política una vez se celebraran los comicios. Extremo que nunca llegó a producirse.
Ahora, el alcalde cree que ha llegado su hora. De ahí que, en privado, ya haya dejado bien claro que su intención es formar parte del hipotético Ejecutivo del PP, tal y como adelantó este diario. Y, además, en un puesto de relevancia: se ha hablado desde una vicepresidencia a las carteras de Fomento, Justicia e incluso Interior.
A micrófono abierto, Gallardón no cierra la puerta y se limita a decir que sigue en Madrid y no "en el cónsul de Bielorrusia", donde se habría ido –apuntó- si Rajoy así se lo hubiera reclamado. "No tengo ninguna otra visión en este sentido", remató, para desvelar una conversación con Rajoy en la que el segundo le emplazó a quedarse en la capital. "Te veo en Madrid", le dijo, según su versión.
Sin embargo, a renglón seguido, el alcalde ya dice que no volverá a ser alcalde. Tres mandatos, aseveró, le parece "excepcional" pero cuatro es "imposible". Y de ahí que haya aumentado sensiblemente las responsabilidades consistoriales de Ana Botella, su sucesora natural: "Tengo acreditadas razones", afirmó. Ya en alguna ocasión solemnizó que la esposa de José María Aznar está preparada para tomar el bastón de mando.
Y, para rematar, vincula su futuro al de Rajoy: "Cuando deje la presidencia, dentro de ocho años sino más, yo creo que con él dejaremos la primera línea política otros muchos compañeros de partido". Hasta entonces, eso sí, no se cierra a nada, aunque ya no será en la capital.