Bildu ya tiene el poder sin condenar a ETA

La coalición Bildu, el instrumento político de ETA según el Tribunal Supremo y las fuerzas de seguridad, ya gobierna en las instituciones. Y ha arrancado su andadura en ayuntamientos y demás organismos públicos sin censurar al terrorismo. "No han renunciado a nada y tienen mil concejales", denunció, en la víspera de la configuración consistorial, María San Gil. Y así ha sido, ante el beneplácito del Gobierno central y la pasividad del PP.

El repaso por los municipios conquistados por Bildu en País Vasco y Navarra es desolador, siendo Lizarza -icono del constitucionalismo en la anterior legislatura- el
reflejo vivo del cambio. En la fachada de su Ayuntamiento ya no ondea la bandera de España, algo que consiguió -pese a coacciones y amenazas- Regina Otaola.

El totalitarismo ha protagonizado la primera sesión, habida cuenta de que los proetarras han impedido acceder a los periodistas al pleno. Bildu tiene en este consistorio
mayoría absoluta, con siete ediles.

En San Sebastián, Juan Carlos Izagirre, el cabeza de lista de Bildu, ha sido elegido nuevo alcalde en sustitución del socialista Odón Elorza, en un pleno sin sorpresas en el
que el nuevo regidor sólo ha contado con el respaldo de los ocho concejales de la coalición que aglutina a Batasuna. No ha habido condena alguna a ETA.

Alrededor de un centenar de personas ha respondido a la llamada de Bildu, que había pedido a sus simpatizantes que acudieran al exterior del consistorio el día de su
constitución. Las consignas de los concentrados se oían desde el salón de Plenos. Se han espetado gritos a favor de los presos etarras y de la independencia.

Joseba Permach, miembro de Batasuna-ETA, felicitó al nuevo alcalde en la calle, donde algunos de los congregados portaban carteles con la frase en vasco "Ahora sí, Donostia socialista", además de sendas pancartas en las que se leía "El cambio ha llegado a Donostia" y "Euskaldun y soberano. Vivir en euskera".

PSOE y PNV ayudan a Bildu

Bildu se ha hecho también con la alcaldía de la localidad vizcaína de Lanestosa gracias al apoyo del PSE en el consistorio, lo que le ha permitido arrebatar el gobierno al PNV, que había obtenido un edil más que los proetarras.

Una decisión que entra en colisión frontal con el compromiso expresado por Patxi López, Alfredo Pérez Rubalcaba e, incluso, José Antonio Alonso de que el Partido Socialista del País Vasco no llegaría a acuerdos de gobierno con candidatos no constitucionalistas en los ayuntamientos vascos.

En Llodio si bien el PSE no ha apoyado a la coalición proetarra sí ha facilitado que se haga con la alcaldía al votar a su propio candidato en lugar de respaldar al del PNV.

El Partido Nacionalista vasco tampoco se ha quedado atrás y no ha dudado en ayudar a los proetarras. En Lasarte, los dos concejales del PNV unieron sus votos a los de Bildu y una plataforma independiente para arrebatar la alcaldía al PSOE.

Acoso al PP en Elorrio

Donde no consiguieron el bastón de mando fue en Elorrio. Tal y como se comprometió, el único concejal del Partido Popular en el municipio, Carlos García, votó a favor de la candidata del PNV, arrebatando así el poder a Bildu.

Este hecho no gustó nada al mundo etarra, que utilizó la constitución consistorial para acosar a García, que tuvo que ser escoltado hasta su coche ante una turba que no paraba de insultarle y amenazarle.