El presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha dicho que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, no podrá seguir gobernando "tranquilamente" tras el fracaso del PSOE en las elecciones de ayer y ha añadido que si estuviera "en su pellejo" se plantearía un adelanto electoral.
Fernández Vara ha hecho estas declaraciones a RNE, en las que ha expresado sus dudas sobre si celebrar primarias en el PSOE para sustituir a Zapatero como candidato a la Presidencia del Gobierno "es lo adecuado en estos momentos".
Ha subrayado que Zapatero "marcó una hoja de ruta" en el último Comité Federal del PSOE "lo suficientemente intensa como para dedicarse a ello en cuerpo y alma" y que "no hay que mirar lo que más interese" a su partido, "sino al país" porque "hay asuntos muy importantes para resolver". "No obstante, no estoy en su pellejo. Si estuviera, me lo plantearía. No me lo he planteado", ha apostillado.
El presidente extremeño ha hecho hincapié en que el PSOE tiene que asumir su derrota en las elecciones autonómicas y municipales celebradas ayer y reconocer "que algo habremos hecho mal cuando los ciudadanos nos han dado la espalda", sin "culpar a los demás". "Creo que hay que asumir nuestra responsabilidad", ha sentenciado.
Preguntado por si dimitiría como secretario general del PSOE en Extremadura si no consigue formar Gobierno, Fernández Vara ha recordado que el congreso se celebra el año que viene por lo que "no hay que precipitarse" pero ha reconocido que "evidentemente, sería un fracaso y tendríamos que responder de ello".
La conformación del nuevo gobierno extremeño tras los comicios autonómicos de ayer "está en el aire" ya que, aunque el PP ha conseguido por primera vez en 28 años ganar unas elecciones autonómicas, sus 32 diputados no son suficientes frente a los 33 de un posible pacto entre el PSOE (30) e IU-SIEX (3).
Ha señalado que el PSOE sale "de casi todas las instituciones" tras las elecciones y se va a la oposición "en un número muy importante de regiones y localidades" por lo que ahora tendrá que "volver a empezar".
"De lo que se trata es de que podamos aparecer ante la ciudadanía como un partido dedicado a resolver los problemas de España y de los españoles, y habrá que medir muy mucho si meterse en un proceso que puede incluso dividir al partido es lo adecuado en estos momentos. Tengo mis dudas", ha continuado.